La Verdad y la Mentira

Hace siglos Prometeo tomo barro y con él formó la verdad, a fin de que pudiera ejercer la justicia entre los hombres, justo cuando acababa de concluir el modelado, Prometeo fue convocado de manera repentina por un mensajero de Zeus, y tuvo que confiar a su ayudante, un personaje travieso llamado Engaño la custodia de su taller.

Engaño que deseaba superar a Prometeo en la forja de esculturas, diseñó una, semejante a la de la Verdad, con un rostro, unas formas, y una estatura idéntica, sin embargo, Engaño que había logrado realizar una copia perfecta de la verdad modelada por Prometeo se encontró con que no tenia barro suficiente para hacerle los pies, cuando regresó Prometeo no pudo sino admirarse de la semejanza existente entre las dos esculturas, la de la Verdad que había modelado él y la nacida de las manos de Engaño. Sin embargo decidió que fuera el contraste con la realidad el que dejara de manifiesto que arte era superior, si el suyo o el de Engaño, llevó pues las dos imágenes al horno y cuando quedaron cocidas les infundió el espíritu, en ese momento la Verdad formada por Prometeo avanzó con pasos humildes, pero la estatua formada por Engaño no pudo dar un solo paso al carecer de pies, recibió entonces el nombre de Mentira porque aunque su apariencia puede ser idéntica a la de la Verdad, no es capaz de caminar al carecer de fundamentos y confianza.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 13 de Octubre de 2010.