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4 de abril de 2016

Mi vida vale un diez

No me gusta la forma de mirar que me tienen, aún no me conocen para tomar esa determinación, aunque ellos pueden pensar lo mismo de mi, me siento vigilada en una prisión sin barrotes, sin rejas, pero con muchas carencias, y además la medicación que me sirven, me deja fuera de mi y sin embargo mis sentimientos me dicen que sobro aquí, rodeada por vainas que envuelven nuestro cuerpo cuando no tenemos mente, !que pena¡

Después de haber tratado vilmente a mi persona por el amor que sentía, he aprendido que no merecía la pena morir por quien no te quiere, he aprendido a dar gracias por respirar todos los días, por despertar a la vida cada mañana y luchar por ser la mujer y madre que soy, y derrochar mi cariño con aquellas personas que me abren su corazón.

Tuve la suerte de conocer a una persona que me tendió su mano, que me animó cuando estaba a las puertas de esta prisión, y he pensado mucho en sus consejos y sus palabras, y pienso que es sano, que sin conocerme de nada, ve que mi vida tiene sentido, como la de todos, espero tener la oportunidad de agradecerle su atención.

Hoy hace cuarto días que entré en la planta de psiquiatría de este hospital, y sigo sintiendo que este no es mi lugar, deseo cuanto antes salir de aquí.

Suena mi nombre por el altavoz, por un lado siento miedo, miedo a quedarme aquí mas tiempo, y por otro lado alegría de pensar que me dan el alta para ir a casa, esperemos lo segundo.

!Que alegría¡, acaban de decirme que estoy de alta médica, y que me puedo ir a casa, las lágrimas que acarician mi cara y la sonrisa en la boca dan a entender la felicidad que siento, y que vuelvo a respirar este aire que tanto necesitaba, estoy en la calle y libre, !Que bien¡

Mi casual consejero vino a verme, le prometí que intentaría hacerle caso, y curarme lo antes posible, le comenté que lo primero que hice al llegar a casa fue tirar por el retrete la medicación que me habían impuesto, y lucharé para no tener que volver a utilizarla y se alegró al saber que después de cuatro días en el hospital, he vuelto a mi casa, con mis hijos, con mis rutinas caseras odiadas por quien no pasa por mi experiencia y desde hace cuatro días anheladas por mi, yo me alegré también de verlo, porque quería darle a demostrar el bienestar que le prometí y ve en mi otra persona que abre los ojos con energía sin miedo a nada.

Es verdad el dicho "nunca te acostarás sin aprender una cosa mas", aunque lleve mucho tiempo siendo la que querían, otras personas, a partir de hoy vuelvo a ser yo, y he entendido la lección, mi vida vale un diez.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 07 de Abril de 2011

23 de noviembre de 2015

¿Loco?


Creo recordar que en un artículo anterior que hacía referencia a la cultura popular, recibió un comentario que elogiaba dicha cultura y la creía base de vivencias de la vida.

Hoy en este, quiero volver a reincidir o resaltar una de las letras de una canción que tiene que ver mucho con el título del artículo.

Algunas veces, pienso que estoy loco o que los demás, no están muy cuerdos, algunas veces quiero sonreír, y otras también, mientras observo que los que me rodean, o con los que en este mundo vivo luchan y luchan dejando sus pieles en ello por conseguir mas, y quedando atrás lo mas importante vivir.

Para mi la vida ha sido también injusta, también he sufrido laboralmente, familiarmente, sentimentalmente, soy como todos. Las llagas del dolor siguen estando en mi piel, y los recuerdos que me vienen a la memoria detallan a veces esos sufrimientos, y de mis ojos caen de ven en cuando esas lágrimas que sirven para desahogar mi alma, ¿quizás no hice suficiente?, ¿quizás me pasé en el encono?, pero solo tenemos una vida donde encontramos de todo, y pienso que de tanto rodar en la corriente de la vida hay que tratar de tener siempre la sonrisa que tu espíritu necesita para encontrarte al nivel que ella te exige.

Cuando leo los artículos que hacen referencia a la prepotencia, al acoso de cualquier tipo, a la traición de un amigo, etc., pienso que la gente que usa estos tipos de artimañas, no están sanos mentalmente, y los considero locos, locos de atar, de tratamiento lento y extenso.

Los que sueñan con poder tener de todo a costa de cualquiera, o de cualquier manera, también los considero peligrosos por el desequilibrio que demuestran, el aplastar a los que lo necesitan mas que ellos, o a los que por méritos son mas dignos de alcanzar el puesto que hay en litigio, para mi el sitio que se merecen es una jaula a la cola de la corriente de la vida.

Quizás viva en mi mundo Yupi, o quizás el loco sea yo, pero con las espinas que la vida me clavó, con los deberes que dejé en el camino, considero justo que la vida de cada uno es para que la viva a su manera, utilizar el don de la inteligencia para discernir que la felicidad llena mas que el llanto, y que el gozo por ayudar al necesitado aunque este no demuestre su gratitud, el placer de haber contribuido a sacar adelante al amigo hundido, y por supuesto tener siempre la sonrisa cada mañana para aquel que lo necesite, o ¿estoy loco?.

Y aprovechando la cultura popular, a continuación escribo una letra que me gusta cantarla cuando estoy de fiesta con mis amigos.

Voy de loco por la vida
soy bohemio y soñador

y no tengo mas riquezas

que vivir con ilusión

tengo junto a mi balcón

un nido de golondrinas

un campo lleno de almendros

y flores en la colina

y lo hermoso de un querer

tengo las noches mas bellas

un río lleno de estrellas

y el amor de doña Inés

voy de loco por la vida

soy feliz a mi manera

sueño un mundo de colores

sin rencores ni fronteras

Loco

me llaman el loco

y en mi locura

yo sueño un mundo nuevo

sin amarguras.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 23 de Agosto de 2010.

21 de octubre de 2015

Recuerdos robados



Las paredes blancas de la habitación en la que se encontraba, le evocaban a algún momento feliz de su vida. Era incapaz de recordar exactamente cuál, pero sabía con certeza que era un instante que le reconfortaba.

Cuando focalizó su atención en las personas que le rodeaban, pudo vislumbrar en sus rostros preocupación y tristeza. Siempre fue bueno en reconocer primeras impresiones. Algunos de ellos iban ataviados con batas blancas. Supuso que serían médicos. No sabría decir por qué, pero esta indumentaria le daba pavor.

Cuando intentó expresar su temor por la situación en la que se encontraba nadie lo entendió y su intento de comunicación generó una conversación entre los presentes. Los supuestos médicos empezaron a informar a las otras personas desde cuándo hacía que no articulaba bien las palabras el paciente. Parece ser que no hacía mucho que esto empezó a ocurrir.

La situación se tornó preocupante cuando una de las mujeres presentes que no llevaba bata empezó a llorar. Entre sollozos se le entendía una frase: “ya no me reconoce, ni a mí ni a nadie”. Era una mujer de avanzada edad. Sus supuestos familiares la abrazaron. Algunos lloraron con ella. Otros intentaron consolarla.

La situación le generaba indiferencia. Lo único que quería era una cama donde descansar y alejarse de esos supuestos médicos. Al notificarlo a los presentes obtuvo éxito, puesto que esta vez si hubo comunicación. Le dijeron que pronto estaría descansando.

A continuación, le enseñaron una serie de fotografías de personas que se suponía que eran allegadas a él. Tan solo pudo reconocer a su madre en una imagen. Joven y preciosa. “Siempre me dice que cuide de mi hermano pequeño - dijo-  ya tengo 9 años y tengo que ser responsable. Ayer me lo recordó”

La situación se tornó más dramática aun. Los médicos advirtieron esto y fueron sacando a los familiares. Mientras tanto les fueron diciendo que seguirían con el tratamiento, pero que el paciente ya había entrado en la fase crítica de la enfermedad. Se había intentado ralentizar todo lo posible, pero con los métodos actuales esto era inevitable.

Lo único que pasaba por la cabeza del paciente desde que vio la imagen de su madre era que quería descansar en su regazo como lo hizo hace poco. Fue entonces cuando relacionó el blanco de las paredes con la textura de la piel de su madre cuando ésta le daba su alimento diario. Fue entonces cuando durmió.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 15 de Enero de 2013.

26 de febrero de 2015

Sabiduría de gente llana


Como cada cierto tiempo, nos dispusimos a dedicar una jornada de pesca en el rincón que desde hacia mucho decidimos utilizar presintiendo que allí se nos daría bien.
Aquella noche apareció él, desaseado, con ropa vieja, con un pitillo en la boca, y sobretodo muy buena educación. 
-Buenas noches- saludó, a lo que de una manera sospechosa se le contestó, (el fisgonear en la pesca, trae a la larga algún que otro problema), pero como personas civilizadas que nos apreciábamos, saludamos a aquel individuo, que por el acento me parecía que era de la parte del norte, y en concreto asturiano.
-¿Que tal se da la pesca por aquí?-, preguntó, 
-Bueno, algunas veces bien, y otras no tanto, pero el ratillo siempre es ameno entre los que venimos, que ya es mucho.
-Eso es lo mas cierto que sacareis de estos momentos-, y creo que fue una frase que venía de una persona que necesitaba no encontrarse sola, y convenimos que así era.
Se llamaba Fernando, se fue a mejor vida hace tiempo, pero hoy me gustaría dedicar este articulo a las personas que puedan verse identificadas, y a las que no, que vean los cambios y giros que da la vida.
Después de varias veces que tuvimos la suerte de volver a ver a nuestro desaseado pero cortes interlocutor en las sesiones de pesca, sentimos que no era normal que una persona de esa cultura dedicara su tiempo a trabajar de vigilante en un pequeño muelle pesquero en una localidad de una ciudad pequeña, pero se trataba de un trabajo digno, y además podía verse lejos de la tierra que trae los problemas que la vida le había regalado, eso era lo que deducíamos ya que en principio era muy introvertido con respecto a su vida, pero nos dejaba entusiasmados con los relatos que contaba nuestro ya amigo Fernando, no solo lo que contaba, si no como lo hacía y los detalles que aplicaba para que viviéramos sus relatos, !que maravilla! 
Hoy me acordé de ti buen amigo, lastima que tu tiempo entre nosotros fue corto, creo que en lo que tuvimos la suerte de encontrarnos, y compartir tu sabiduría y nuestra compañía, creó una simbiosis la cual era deseosa por ambas partes.
Hoy podemos contar que estamos, que ya es mucho, mañana quizás, los que podamos contarlo, apreciemos lo que tengamos como lo hacia Fernando cada día, no es que se conformara con lo que la vida le daba, si no que valoraba cada gota de lluvia, cada leve brisa, en definitiva engrandecer las cosas pequeñas que poseamos. 
Hasta siempre Fernando.
Para que sea mas intensa la lectura, he colocado un vídeo-clip, espero que os guste.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 15 de Abril de 2010.

6 de mayo de 2014

Mi embarcación



 

El cabo Haddock consideraba que dominaba su gran embarcación. Craso error, amigo escafandra, te han convertido en una figura exclusivamente decorativa y te dejan que lleves el timón ya que es una réplica china que imita al verdadero y que por fortuna está en otras manos, de momento...

Tú te sientes feliz ya que aunque sospechas el engaño te dejas embaucar por amor, mucho amor.

Tus descendientes: vigilan y supervisan; te bronquean; te quieren demasiado, pero tus decisiones son todas filtradas y la mayoría anuladas. El amor paterno filial a veces viaja en un camarote interior, sin vistas al mar y con leyes que siempre protegen al menor, al de la litera inferior.

Los que no llegaron: nadan de isla en isla y nunca escalan en la tuya. Le escribes sms y siempre te dicen: “a la orden, capitán”, pero hoy no, la próxima vez será.

Tus amigos ¿ ?: digamos que hablo de Jekyll and Mr Hyde, del economista, el analista de sistemas o la que nunca se implica en nada: ellos simplemente no navegan, se marean y no saben nadar, no están.

Y qué me dices de tus mujeres, tu harén. Ellas descansan en las bodegas del pasado y no desean volver con un cabo anarquista, de escaso capilar y que dirige una nave con el corazón dolorido y un sextante de plástico.

¡Pobre de ti, ladrón de sueños! ¡Qué solo te veo! Tu barco hace aguas desde hace ya algún tiempo y sin embargo tu estupidez no te permite ver la realidad y sigues pensando que vas el primero en la regata de los solitarios (eso lo dice el can).

La injusta se ha aliado contigo y veo pocas soluciones para tu permanente tristeza, quizás lanzarte y encallar en un campo de amapolas, quizás, solo quizás, logres retrasar el tiempo y tu barco vuelva veinte años hacia atrás, a la normalidad.

¡Ah! Se me olvidaba, siempre puedes acurrucarte a tu almohada chiquitita y ella con sus besos te haga olvidar. 

No busques fuera lo que en casa tienes ya.
Para todos los que navegan en barco ajeno y llevan la tormenta en su corazón.

5 de mayo de 2014

Mi vida perdió tu vida


Cuando me dieron la noticia, eché a llorar, aunque aún no se había perdido todo, y tenías posibilidades de seguir conmigo, el riesgo de perderte era alto.

Me había acostumbrado a ti, notando poco a poco tu presencia, deseando sentirte, agradeciéndole a Dios que me había regalado, tu vida.

A medida que los minutos pasaban, intentaba no perder los nervios, serenarme para así conseguir que no te marcharas, que estuvieras tranquilo a mi lado. Despierta, veía lo que me deparaba el futuro, te cuidaba, te amaba, porque mi vida la dedicaba a ti, sin trabas sin ataduras interesadas, solo puro amor.

Otro día mas con la intranquilidad de saber que sigues conmigo, no se si podré aguantar tanto tiempo, pero también tengo la suerte de contar con gente que me quiere y tratan de distraer mi mente para que los minutos pasen sin estar contándolos, que bien se siente una sabiendo que es querida.

Hoy cuando pregunté por ti, se me cerraron todas las luces, se acabó las fiestas navideñas, se oscureció el cielo. El doctor me informó que te habías marchado pero sin abandonar tu cuerpecito en mi vientre, y tendría que extraerlo para que yo no sufriera otro tipo de percance y fuese perjudicial para mi, hasta llegué a pensar, !ya que mas da!, no podría ver el color de tus ojos, de tu pelo, no podría acariciar tus pequeñas manos, besar tu frente, darte de mamar, sin embargo debía tratar de hacer caso al galeno.

Después de la consulta médica me sentí un poco mas tranquila, me esperaba mi pequeño bichito en casa, y mi marido mas cariñoso que nunca me daba el calor que en esos momentos necesitaba.

Si, he perdido a un hijo que no llegó a formarse en el lugar adecuado, y debido a eso se desprendió y murió y es muy doloroso, pero tengo a mi primer hijo y he de luchar por curarme física y animicamente para volver a intentar traer al mundo a un hermano para el y nosotros sus padres.

A veces, el dolor es mas fuerte cuando soñamos despiertos en un futuro, en el mañana, y no vemos la realidad del momento, aunque lo tengamos tan cerca como a nuestro hijo en nuestras entrañas.

Si, mi vida perdió tu vida, pero por ti aprendí a no tener prisas, a ver y disfrutar el presente, y volveré a intentarlo.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 29 de Diciembre de 2012.

20 de abril de 2014

Una dama luchadora


Como en cualquiera de los locales que frecuentamos para tomar café, entré en aquel lugar por primera vez, donde conocí a la protagonista de mi dedicatoria, una señora sencilla, humilde y trabajadora que enriquece su trabajo solo por la forma tan cariñosa de como te trata. Me habló un poco de sus andanzas por el mundo y lo que costó llegar hasta aquí, todo esto aderezado con una sonrisa perenne y la dulzura de su voz.

De ahí que me tomase la libertad de escribirla esta pequeña poesía, y como no, acompañada por una cancion de tu tierra.

Ella da gracias al viento
para seguir con la rutina
vivir ya es sufrimiento
que pide la vida misma.
Se mantiene firme en el aire
con gracia mece su cuerpo
bailar es lo que parece
llegando todo lo lejos
que su apetito necesite.
La comida busca con anhelo
para subsistir día a día
y aletea por los cielos
con la suerte de apreciar
el ir y venir de los demás
con sus sanas locuras
sin saber que buscar
deambulando en la aventura.
Ella sigue aleteando,
el trabajo la hace fuerte,
aunque flaquee su corazón
lo reanima con la gente
que ve cada mañana,
en cada atardecer,
en cada madrugada,
en cada saludo,
con una simple mirada
en este camino duro
que nuestra mente agota,
un ejemplo siempre a seguir
mi amiga Marta Gaviota.




Artículo reeditado: Originalmente publicado el 17 de Abril de 2010.

1 de abril de 2014

¡¡¡Imposible!!!


Las neuronas son vida. Tienen una parte predominante, larga, llamada Axón.
Las neuronas conectan con sus compañeras a través de las dendritas. Transmiten vida, naturaleza, sentimientos, sensaciones, pero no todo es fantasía; no pueden completar su ciclo vital.

Viven en su clase G1, añoran una siguiente fase, donde su ADN se replique y se convierta en S.
Necesitan la fase G2, donde sueñan con proporcionar larga vida a sus descendientes, algo que ocurriría en la mitosis (explosión orgásmica).
Sin embargo no les queda otra que morir en su impotencia.

¿Dónde están las cavernas llenas de sangre?
Muchas dudas pasan por la mente: no es una cuestión de tamaño, ni de ganas; existe el deseo, el querer y no poder, con todo su amor y su ilusión.
¿Por qué me ocurre a mí?, ¿Por qué la naturaleza me ha elegido a mí?
¡Sólo quiero crear vida!

No elijo, estoy en esa situación que no he elegido. Me siento marginado en esta sociedad implacable, llena de trabas, donde estoy y estaré condenado en una maquinaria fría, sin escrúpulos, sin sentimientos, superficial, machacadora.

Aunque la ciencia ofrece medios para la reproducción, el ser humano necesita calor, amor, pasión, sentir, abrazar, fundirse con su ser querido, oyendo una canción que una sus corazones; que sus sentimientos básicos fluyan por los ríos de lo natural, pero las neuronas de mi cuerpo me dicen que no hay manera.

¡Imposible!.


Artículo reeditado: Originalmente publicado el 27 de Abril de 2010.

12 de febrero de 2014

El sendero de la verdad

Hoy tuve la mala suerte de conocer los cambios que se producen cuando la vida te da un giro. Se que la verdad es la puerta que te abre la tranquilidad, el sosiego, la paz. Es tan difícil hallarla como así mismo conseguir un amigo, un verdadero amigo.

Hoy mi corazón se encuentra triste, topó con la desilusión que entra cuando un amigo traiciona a otro, cuando la desconfianza ceba los pensamientos que antes eran positivos, afectuosos, impertérritos, solo un pensamiento, la amistad, el apoyo incondicional en los momentos débiles, en los males, en las angustias, en la soledad, en todo momento sabiendo que hay un hombro donde apoyarte, una persona para que insufle de ánimos tu corazón desgajado, dolorido, agotado.

Podrán decir de mi que vivo en mis nubes, que mi felicidad en infundada, que tras la máscara de la ironía existe un hombre amargado, no,no, se equivocan, quizás mis nubes están mas bajas de lo que creen algunos, y por mucho empeño que ponga para no ser infeliz, se que la vida te da y te quita, y en estos momentos me da una de arena, de un montón grande de arena.

Tendré que esforzarme mucho para poder seguir haciendo lo que hasta hoy estaba haciendo, hablaré conmigo mismo para buscar una quietud que me de la paz que necesito para no dejar de ser el que era, se que lo conseguiré.

Nuestra planeta Tierra sigue girando, nuestro tiempo pasa deprisa, y al despedirnos de esta vida solo nos llevaremos el adiós de los que te rodean, de los que has querido de los que te quieren, que mejor marcha que esa, y de que sirven los rencores, las envidias, el odio, la mentira, solo para que no te puedas marchar en paz.

Las oportunidades se pierden en la vida como se marcha el tiempo, pero para mantener ese tesoro tan preciado que es la amistad, hay que seguir dando oportunidades, todas, conseguir un amigo es muy difícil, pero que muy difícil, porque tenemos cerrada la puerta de la verdad.

Artículo reeditado: originalmente publicado el 07 de Octubre de 2010.

7 de septiembre de 2013

¿Por qué yo?


Carta de amor de una mujer desconocida.
Te quiero a pesar del poco trato que hemos tenido, mi memoria ya ha olvidado el momento en que deje de considerarte como alguien mas en mi existencia, para pensar en ti como mi amor, mi único y verdadero amor, el amor más grande de mi vida, quizás sea por tu mirada transparente y sincera, por tu delicioso mal carácter, o por tus ideas a veces tan extrañas ¿quién sabe porque?

Pero te quiero con todo mi ser, con todo mi corazón y mi cabeza, con todo lo que soy y me gustaría ser por ti, por mí y por nosotros aunque nunca he sido tuya ni tu mío, y esto tal vez nunca ocurrirá, te quiero.

Aunque mañana descubra que no eres libre y nunca lo serás, te quiero, este sentimiento me supera, me desborda por completo, creando en mi un estado de gracia cada vez que te veo, cada vez que te siento cerca, cada vez que me diriges la palabra, soy tan feliz que bendigo esta sensación que aun incompleta por no correspondida, me hace vivir en una nube y desear que mis sueños lleguen algún día a convertirse en realidad.

Te quiero, es un hecho pero tu no lo sabes y ni siquiera sé si lo intuyes, hemos hablado poco y sin embargo te conozco tanto, eres independiente, con espíritu rebelde, eres consecuente, entretenido tienes tantos temas de conversación que una no se aburre al hablar contigo, te encanta la buena vida y los pequeños placeres, a quien no.

Eres comprensivo y tienes sensibilidad con las mujeres, eres critico aunque a veces muy irónico, eres todo eso y mil cosas mas que me encantaría descubrir, a través de tu conversación, de tu compañía, de tu roce y sinembargo aquí estoy, sin traspasar ese umbral, pensando en ti, suspirando por ti, y a pesar de todo sin ti.

¿Por qué nos cuesta tanto entablar una relación? ¿por qué nos enamoramos de personas equivocadas? ¿por qué yo? ¿por qué tu? ¿por qué el amor? Las preguntas suenan en el aire sin respuestas y mientras tanto yo te quiero, seguirás siendo mi amor platónico, mi objeto de deseo en pensamiento y palabra, que no en obra si la casualidad o el destino no lo remedia.

Y a la vez que te quiero sufro por no tenerte, por sentirte tan cerca y a la vez tan lejos, por tener la miel en los labios y no poderla saborear, quizás tengamos un futuro juntos o tal vez este amor no nos convenga y por eso nunca se culminará, pero entonces algún día llegará otro amor y nos hará felices, me hará feliz, tan feliz como ahora me haces sentir tu, mi adorado amor platónico, porque a pesar de todo te quiero.

Artículo reeditado: originalmente publicado el 31 de Mayo de 2011.

28 de julio de 2013

Ecos del Universo

Pues sí, como se puede comprobar, “Ecos del Universo” es el título de un libro escrito por Manuel García, patrocinado por la Obra Social de Cajasol e impreso por Artes Gráficas Bonanza.

Así, a primera vista, es lo más normal del mundo, como ocurre en infinidad de casos. Pero si nos adentramos en el mundo que rodea al autor Manuel García García, Manolo o, simplemente, Manolito, como cariñosamente lo conocemos muchos de sus allegados, el panorama cambia trescientos sesenta grados, Porque, para “más inri”, aparte de otras deficiencias físicas, Manolito es paralítico cerebral.

Es duro, durísimo, para él y no digamos para sus padres –Pepe y Flora-, que sus cuarenta y siete años hayan supuesto una vida más que difícil y complicada por sus continuas alteraciones emocionales. Tan es así que, en la actualidad, el autor del libro es usuario de la Residencia de Graves Afectados, perteneciente a la Asociación de Paralíticos Cerebrales de Huelva. Está claro que dicho Centro le ofrece a Manolo una serie de posibilidades impensable en su hogar familiar y máxime cuando desde, hace unos años, tiene que recibir tratamiento de hemodiálisis.

Todo lo que rodea a Manolo es como su libro: un poema tras otro. Hasta su propia imagen es un calco. Así, palabras cargadas de sentimentalismo, recuerdos olvidados, frases entrecomilladas, misteriosos gestos en su rostro…, parecen proceder de la suave y fresca “brisa” que siempre le acompaña en su enigmática soledad.
De esta forma, porque personas con una sensibilidad exquisita, amable y cariñoso, como lo define Cinta Monsalvete –Presidenta de la Asociación-, no se encuentran todos los días, he querido hacerle un hueco en mi humilde blog, para que quien se acerque por aquí y no lo conozca, pueda saber algo de tan maravillosa persona.

Por consiguiente, sirvan como ejemplos de su personalidad, sueños, inquietudes, anhelos… estos tres poemas recogidos en la citada obra.


PD. Sí, Manolito, sí. Aunque los que estamos en un nivel superior a ti, o así lo creemos, pensemos que muchas veces desvarías, tu mundo y tú merecen mucho más la pena que una simple palmada en el hombro o una frase poco profunda para “quitarte de enmedio”. Por todo ello, por mí y por los demás, te pido de corazón mil perdones por nuestro orgullo y torpeza.

José Antonio.

Nuestro amigo José Antonio, nos remite el artículo y las imágenes que ha publicado en su Blog. Creemos que personas como Manuel, son un ejemplo de superación y siempre tendrán un lugar en nuestro pequeño mundo virtual y en nuestros corazones. GRACIAS.

Artículo reeditado: originalmente publicado el 22 de Abril de 2011.

30 de junio de 2013

Consejos para vivir

Sé firme en tus actitudes y perseverante en tu ideal.
Pero sé paciente, no pretendiendo que todo te llegue de inmediato.
Haz tiempo para todo, y todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en el momento oportuno.
Aprende a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamas.
Espera con paciencia a que maduren los frutos para poder apreciar debidamente su dulzura.
No seas esclavo del pasado y los recuerdos tristes.
No revuelvas una herida que está cicatrizada.
No rememores dolores y sufrimientos antiguos.
¡Lo que pasó, pasó!
De ahora en adelante procura construir una vida nueva, dirigida hacia lo alto y camina hacia delante, sin mirar hacia atrás.
Haz como el sol que nace cada día, sin acordarse de la noche que pasó.
Sólo contempla la meta y no veas que tan difícil es alcanzarla.
No te detengas en lo malo que has hecho; camina en lo bueno que puedes hacer.
No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar.
No trates que otros cambien; sé tú el responsable de tu propia vida y trata de cambiar tú.
Deja que el amor te toque y no te defiendas de él.
Vive cada día, aprovecha el pasado para bien y deja que el futuro llegue a su tiempo.
No sufras por lo que viene, recuerda que “cada día tiene su propio afán”.
Busca a alguien con quien compartir tus luchas hacia la libertad; una persona que te entienda, te apoye y te acompañe en ella.
Si tu felicidad y tu vida dependen de otra persona, despréndete de ella y ámala, sin pedirle nada a cambio.
Aprende a mirarte con amor y respeto, piensa en ti como en algo precioso.
Desparrama en todas partes la alegría que hay dentro de ti.
Que tu alegría sea contagiosa y viva para expulsar la tristeza de todos los que te rodean.
La alegría es un rayo de luz que debe permanecer siempre encendido, iluminando todos nuestros actos y sirviendo de guía a todos los que se acercan a nosotros.
Si en tu interior hay luz y dejas abiertas las ventanas de tu alma, por medio de la alegría, todos los que pasan por la calle en tinieblas, serán iluminados por tu luz.
Trabajo es sinónimo de nobleza.
No desprecies el trabajo que te toca realizar en la vida.
El trabajo ennoblece a aquellos que lo realizan con entusiasmo y amor.
No existen trabajos humildes.
Sólo se distinguen por ser bien o mal realizados.
Da valor a tu trabajo, cumpliéndolo con amor y cariño y así te valorarás a ti mismo.
Dios nos ha creado para realizar un sueño.
Vivamos por él, intentemos alcanzarlo.
Pongamos la vida en ello y si nos damos cuenta que no podemos, quizás entonces necesitemos hacer un alto en el camino y experimentar un cambio radical en nuestras vidas.
Así, con otro aspecto, con otras posibilidades y con la gracia de Dios, lo haremos.
No te des por vencido, piensa que si Dios te ha dado la vida, es porque sabe que tú puedes con ella.
El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que has tenido que enfrentar en el camino.
Tú y sólo tú escoges la manera en que vas a afectar el corazón de otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida.
“Que este día sea el mejor de tu vida".

MAHATMA GHANDI

Los Amigos son la Familia que nosotros elegimos

Un Seguidor Anónimo, nos ha dejado estos pensamientos de Ghandi como comentario, es la visión de un sabio para hacer frente a la vida. GRACIAS.

Artículo reeditado: originalmente publicado el 04 de Noviembre de 2011.

1 de junio de 2013

Una mala tarde la tiene cualquiera


Pepe, gran amigo mío desde la infancia, hacia tiempo que no nos veíamos y mira por donde el otro día nos encontramos, después del saludo protocolario mantuvimos una conversación agradable y distendida, recordando viejos tiempos, batallitas ya pasadas, también hablamos de lo típico, como te va a ti la vida, pues mira no me puedo quejar, estoy hasta los guevos pero vamos tirando, pues claro hombre siempre hay que mirar para atrás, otros peores pero lo importante Pepe es ir tirando, al fin y al cabo esto es un país de mulos, todos vamos tirando, para despedirnos solo nos falto decirnos adiós Don Pepito adiós Don José.

Ya de regreso a mi casa me iba descojonando de risa recordando una historia que le sucedió a Pepin, y que después me contó.

Hace la friolera de aproximadamente unos treinta años, el sujeto trabajaba en una empresa de mantenimiento de jardines, él estaba destinado en un parque llamado popularmente EL DE LAS PALOMAS. Recuerdo que en aquel parque existía un pequeño bar y a pocos metros de distancia un quiosco de chucherías.

Pepe siempre fue muy tímido, especialmente con las mujeres, pero con el tiempo entablo una incipiente amistad y confianza con la dueña del quiosco, la señora bastante mayor que él.
La cosa empezó por el tabaco, ya no le cobraba el cigarro, incluso casi a diario las cervezas que Pepin tomaba en el bar le salían gratis, pues ella, la del quiosco era la que las pagaba, el rizo se fue rizando y Lola que así se llamaba la muy espléndida señora, cierto día antes de que Pepe terminara su jornada, esta mujer le invita a almorzar, y el por cortesía acepta la invitación.
Antes de emprender viaje hacia el lugar convenido (cinco kilómetros de distancia desde el parque), en un bar cercano al puerto, a Lola se le antojo tomar unas cervecitas para entonarse, no más.

Después de las cervecitas se montaron en el coche, rumbo a lo desconocido, mientras Pepe conducía, la Lola que iba caliente casi que se lo comía, un mordisquito en la oreja, un pellizcon en un brazo, un toque en las partes nobles, le falto el canto de un duro para follarse a Pepin, aquello no era una mujer parecía un brazo de mar, “por Dios Lola para ya que nos vamos a estrellar”. Cinco kilómetros, solo cinco, pareció una eternidad.

Por fin, habían llegado al lugar, entraron al restaurante allí no falto de na, comieron y bebieron lo que cada cual quisieron, la Lola en su frenesí bebía mas que una cosaca, que borrachera cogió y que escándalo monto, que voces daba la Lola “ Pepin tu me la metes a mí”, “que si mujer, pero aquí no puede ser busquémonos un hostal y allí podremos brincar”.
Ni que decir que eso fue una maniobra de Pepin para cortar el escándalo, que lío, creyó que era buena idea para calmar a la menda.

La suerte ya estaba echada, la Lola seguía queriendo hacer una guarrería, Pepin se había resignado a hacer lo que no quería, penso, “casi me dobla la edad pero total que más da, cuando se ponga en pelotas con no mirarle la cara se la meto y ya esta, pensándolo bien será una obra de caridad”.
La cosa no iba a ser tan fácil, pues Pepin iba a quedar peor que Rufete en Lorca (famoso diestro del toreo que en una de sus peores faenas, el toro termino cagandose encima del) una mala tarde la tiene cualquiera.

Ya, ya encontraron el hostal, entraron a la habitación y sin perder ni un segundo, la Lola con su lujuria se quita toda la ropa, se tiende sobre la cama mostrando sus alegrías, Pepe se encuentra de espaldas y al girar la media vuelta, no acaba de comprender lo que sus ojos ya ven, se encuentra dubitativo ¿esta es la Lola en pelotas o un pavo de Navidad?

Pepin tenia dos cojones armándose de valor al ruedo el tío se tiro.

Estando en plena faena, la Lola con mucho arte el rosco le sondeo, y eso pues como que no, a Pepe sentir un dedo urgandole en el trasero, la verdad no le agrado y esta jota le canto:
Ahí va ya la despedida, Cuatro ojos que tiene el puente, / Yo tengo tres solamente: / dos ojos para mirarte / y otro para hacer de vientre, Lola tú a mi no me hincas el diente.

Pepe casi descompuesto, puso pies en polvorosa, sin dar ni una explicación dejo a la Lola en pelotas cuando termino la jota.
La experiencia fue traumática, Pepe estuvo cagando blando 19 días y 500 noches.

Es que una mala tarde la tiene cualquiera, como Rufete en Lorca.

Artículo reeditado: Originalmente publicado el 18 de Octubre de 2010.

23 de mayo de 2013

Mi juguete preferido, mi hijo



Cuando nació vio en él su espejo, sus ojos eran idénticos a los suyos, su boca, su pelo, en definitiva, su cara era la suya, e indudablemente todos los comentarios de familiares y amigos, certificaban lo que él había visto.

A medida que crecía intentaba protegerlo como cualquier padre a su hijo, tratando de que no le faltara de nada, que todo lo que su padre no pudo tener, lo tuviese él, aunque el sacrificio costara lo que costara.

Todo le parecía poco para él, los juguetes innovadores, los últimos del mercado, los mas caros, y de igual forma, su ropa, calzado, comida, la equipación del mejor equipo de fútbol, (el de su padre, el mejor del mundo), hasta el mejor colegio, a fin de que su enseñanza fuese la mejor, o estuviera dentro de las posibilidades de llegar lejos, mas de lo que ellos pudieron.

No solo eso, lo vio tan igual, que le parecía vivir de nuevo pero dentro del niño, y se sentía feliz por cada cosa minúscula que hacía, como así mismo se molestaba por nimiedades que dijeran de su retoño, ya que su hijo era perfecto, los demás son los que por envidia intentan desprestigiarlo.

Cuando jugaban, se lo pasaba pipa, el padre se encargaba de montar los juguetes, viendo el pequeño como lo hacía, y cuando le parecía oportuno los recogía perfectamente colocándole en el lugar adecuado para que no se deterioraran.

Hasta que poco a poco, fue cambiando, cuando pedía un juguete, al instante pedía otro, y después otro, no preocupándose de su recogida, dejándolos en cualquier lugar con el riesgo de ser pisados y rotos, y por mucho interés que ponía en enseñarlo, cada día le costaba mas trabajo educarlo, llegando a utilizar el castigo por no cumplir con las normas del padre.

Hoy tuvo la buena idea de comprar uno de los mas caros, un paso de semana santa, un palio de una de las vírgenes que suelen salir a la calle en esas fiestas, que cuando lo vio en el escaparate, se enamoró de el, con sus candelabros, sus flores, las velas, el manto de la virgen, su corona, precioso, lo llevó a casa, y empezó rápidamente a montarlo, con una ilusión inusitada, observando a su pequeño impasible, mirando como lo hacía.

Le costó dos horas el montarlo, quedó casi, casi, casi igual que el original, y el se lo pidió para jugar, lo cual accedió puntualizando que tuviese cuidado, y lo recogiera como papá suele hacerlo, pero no lo hizo, y después de un tropezón, fue a caer encima de su valioso juguete haciéndolo añicos, velas, corona, manto, todo destrozado, creó tal desilusión en su padre, que este lo emprendió contra el niño castigándolo en su habitación, sin cenar, sin ver televisión, y sin mas juguetes por haber roto su juguete preferido.

Podremos pensar que nuestros hijos son nosotros, en cada instante, en cada mueca, en cada mirada, y ser felices mientras no crezcan, después serán lo que quieran ellos, y tenemos que entender que fue un espejismo, y también tendremos que ayudarlos a que su camino sea lo mas llano posible.

Afortunadamente o no, los que tenemos hijos, no dejaremos de estar ahí para lo que necesiten, simplemente para decirles “te quiero”, o darles un fuerte abrazo y ellos sentirán que estamos a su lado, aunque siempre existan excepciones.

Me viene a la memoria un tema de Serrat, titulado “Esos locos bajitos”, una joya musical del año 1981, que para deleite de todos, dejo su reproducción. 


12 de febrero de 2013

Yo soy maricón y tú también


No voy a meterme en el armario cuando ya hace tiempo que salí de él. Te encontré en una esquina perdido, abandonado y sin saber cuál era la percepción que los demás tenían de ti. Te rescaté y te hice lo que tú deseabas, lo que sentías, eras gay y no lo habías asimilado. Te hice vibrar y te penetré y tú me hiciste lo propio. Desarrollamos papeles diversos e incluso te atreviste a comentarlo en tus círculos más íntimos.

Pero, al final la racionalidad prevaleció, tus padres, hermanos y hermanas te convencieron para que siguieras con la corbata, los músculos de macho, la novia de buena posición y un sinfín de situaciones que tú quisiste explicarme en la despedida y yo simplemente escuché y no quise comprender.

Ahora llevas una vida burguesa, con hijos y con una buena posición pero desconoces que yo sé que a veces cuando el alcohol se mezcla con la rutina tú te marchas a los garitos donde el pene impera sobre la ranura de las chicas de bien y de mal.

Y me cuentan que te dejas poseer, con dinero, sin amor, sólo por sentirse como tú eres: un primate maricón que no has sabido autorealizarte y enfrentarte a la mierda de la sociedad que junto a los poderes fácticos te dictan que tú debes de meterla cuando en realidad te encanta que te la metan.

Lo siento chico, yo sigo siendo gay, con mis defectos y con mis problemas pero me siento desarrollado y vivo de acuerdo a lo que me dicta mi cuerpo y mi alma femenina.

Siento lástima y amor, te perdono, pero vas a estar fastidiando por la eternidad, algunos dicen que jodiendo con ángeles femeninos: Buscas el falso amor, previo pago, mientras yo te lo daba todo por amor, verdadero amor. 

Nunca encontrarás una penetración como aquella del cuarto de baño donde el lavabo se marcho por la ventana del quinto y aterrizó en un coche de la guardia que se dedica a detener a maricones y gays en las noches de soledad, ahora de la tuya.


2ª Colaboración de nuestro amigo y seguidor: "El de Vallecas". El tema que tratas, seguro que a alguien le puede resultar "molesto"; este blog, es un espacio de libertad y aquí no hay temas tabús, ni molestos. Gracias por tu artículo; esperamos más.

Artículo reeditado: Publicado originalmente el 28 de Noviembre de 2010.

10 de enero de 2013

No más lamento


Cuento que desde hace casi 20 años vivo en un edificio situado en una  concurrida avenida. Miles de vehículos pasan a diario por ella, lo cual en ocasiones resulta bastante fastidioso.

Durante todo ese tiempo, el asomarme a la ventana y girar la cabeza hacia la derecha para averiguar hora y temperatura en un reloj digital alojado en uno de esos típicos carteles publicitarios, ha formado parte de mi cotidiano ritual.
Siempre que llovía se estropeaba, y como consecuencia, solía soltarle algún que otro improperio por faltar a su cometido.
También ha habido muchos días, en los que creo haber perdido la noción del tiempo contemplando sus lentos movimientos. 
Ahora que lo pienso, hasta puede que tenga algo de paradójico la forma en la que cuánto más interés le ponemos a algo, más control perdemos sobre ello.
Hace pocos días, en medio de una de esas crisis existenciales que te llevan a necesitar aire en cantidades industriales, al abrir la ventana contemplé horrorizada que mi reloj no estaba en su lugar habitual. 
Había desaparecido. Alguien se había llevado mi reloj. 
Cómo si no estuviera ya bastante jodida, ahora, y por culpa de la genial ocurrencia de alguna cabeza pensante, quedaba totalmente "desincronizada" con el instante….
No pude evitar sentirme más decimonónica que nunca. Y petarda, xd... vaya tía más pastelosa sintiendo pena ante la pérdida de algo a lo que nunca le dio ningún valor....
Al grano:
Hoy desperté con esa sensación que dejan los malos sueños... 
Pero al abrir la ventana, mi reloj había regresado!!

Es él. Lo reconocería entre un millón de relojes.... 
Me lo han tuneado un poco. Han cambiado el cartelón publicitario por uno de mayor tamaño, y aunque no consigo ver bien de qué se trata, me anuncia que por el módico precio de 675 jurones regalan algo... No sé… pero por ese precio, lo mismo me pillo media docenilla de “lo que quiera que sea”... 

No sé si verdaderamente tendrá algún significado, pero al menos me ha servido para darme cuenta que a veces la vida se pone generosamente caprichosa, y de la misma forma en la que nos ofrece cosas que no esperábamos, nos la quita cuando de alguna forma son ya parte de nosotros dejándonos esa frustrante sensación de vacío. E incluso a veces, cuando consigues “superar” esas ausencias, puede que le dé nuevamente el punto y te las devuelva...
En cualquier caso, considero que lo mejor es…. no esperar nada….

Bueno... y también que debemos mimar más lo que tenemos a nuestro rededor.... Sobre todo, aquello que te marca el tiempo en que no sabes si estás o no estás, porque cuando quieras regresar o recuperar, éste te dirá que no hay marcha atrás… 

Nuestra amiga aficionada a escribir "La egoísta razonable", nos remite este simpático artículo, esperamos que le sigan más. GRACIAS.

2 de enero de 2013

Déjate amar


                                                     
No sabía como empezar este artículo, pero un día especial, un día donde la amistad se alimentaba de si misma, hice una foto a la chimenea que calentaba el lugar donde celebrábamos un almuerzo en hermandad, con los que participamos directa o indirectamente en este blog.

Esa foto donde se aprecia la llama que crece, que poco a poco va devorando el tronco para dar el calor necesario, he notado en mí que aun me queda una llama similar, la del amor. !Joder!, parece imposible, increíble, de locos, pero es verdad, lo siento.

Pero para esto también hay que tener algo de suerte, no solo podrás amar a una persona, si no que esa persona se encuentre con la libertad de poderte amar a ti, digo bien, la libertad de poder amar, que paradoja, ¿verdad?

Ella, se encuentra muy bien a mi lado, y yo mejor, pero la vida ha decidido que ambos tengamos senderos distintos, quizás paralelos, pero inalcanzables.

Sin embargo mi corazón tiembla cuando la ve, y noto en ella que pasa lo mismo, se pone nerviosa, aunque personalmente no me lo ha dicho, veo que sus ojos evitan mirar a los míos, y me siento dichoso al creer que está bien cuando estoy a su lado, dejando de ser yo cuando se que me está mirando.

Sus agradables manos, mágicas, suaves, cálidas, suplican que cese este amor que es imposible, pero al mismo tiempo se siente viva, querida, amada, como cuando era una adolescente, importante porque otros ojos la miran con un amor sincero pero que no puede corresponder porque su vida ya está comprometida, pensando que sería una locura romper con todo lo que tiene.

Se que me toca vivir con este dolor, no me importa, he pasado mucho y he sufrido bastante, como para que ahora no tenga aguante, yo también tendría que romper con todo, y es cierto que seria una locura, pero me encanta sentir esa sensación en mi cuerpo, que antes permanecía encerrada. 

No debes preocuparte por mi, yo estaré siempre en la sombra, sin agobiarte, sin pedir nada, mi sufrir no será observado por nadie, nadie notará nada, pero mi llama, la de mi amor, estará encendida como la fotografía que encabeza este pequeño artículo.

Si pudiera me encantaría despedirme con un beso de amor sincero, pero lo imaginaré, y es maravilloso.

18 de diciembre de 2012

Pánico en la cajonera



Aquí nos encontramos con el capítulo de un tío con dos cojones.

El amigo de turno, con 23 años, más grande que un trinquete, tenía pánico a las cucarachas. Veía una de ellas y estaba de forma “ipsofacta” enganchado a la lámpara del techo, como un tití, como una criatura de pecho. Si de camino roza una mano con una araña (insecto), se queda pegado al techo como Spiderman.

Un día tumbado en el sofá, en su particular “Jumanji”, ve pasar por el mueble que tenía de frente una sombra algo mayor de lo que, para él era habitual. Las parabólicas del miedo se ponen en alerta.

La sombra se dirige a la cocina. Como gran lidiador de fauna doméstica, de las incontroladas, y echándole más güevos que el caballo de Espartero, persigue a la sombra, que desaparece justo detrás de un mueble.

En plan pistolero, coge dos botes de insecticida y apuntando al objetivo apretó ambos gatillos con tanta saña que gastó todas las balas en menos de un minuto.

¡Se acabó el problema! Todo queda en olvido y relajación.

Pasados varios días, estando solo, va al dichoso mueble, abre el cajón de sus pertenencias para coger ropa interior, y ZAS, sale un ratón, no colorado, que le recorre toda la mano y brazo. Se acojonó de tal manera que parecía haber visto al Maná-Maná, también llamado “homo corruptus no sapiens”, o al mismísimo león de la Metro.

Ante tal situación de pánico, llamó por teléfono a su novia para que fuese a echarle un cable. Ésta, más valiente que la carne que yo comía cuando era pequeño (con los dientes apretados tiraba de ella como una goma blanda, cuando la soltaba me endiñaba tal golpe que me hacía sangre en el labio, parecía que me había caído de boca), se pertrecha de bazooca, escopeta, hacha, cuchillo, con pinturas guerreras, tipo Rambo cuando fue a Vietnam.

Lo que encontró esta mujer fue al hombre trinquete en estado taquicárdico; se estaba asfixiando, no podía respirar.

Antes de emprender la cacería de la fiera corrupia tuvo que llevarle a urgencias del hospital más cercano. Le hicieron inicialmente un electro; salió alteradísimo, con unos picos que parecían el Himalaya. Como medida preventiva le ingresaron en la UCI de coronarias, monitorizado, hasta no terminar todas las pruebas. Todo salió normal.

Cuando contó lo sucedido al equipo médico  actuaron como si hubiesen leído un chiste del PenaPenita.

Pasado el sobresalto y una vez vuelto a casa, sus padres se pusieron manos a la obra. El objetivo era dar caza al gran felino.

Pusieron trampas por toda la casa, utilizando como cebo queso Bofard añejo gran reserva.

La pobre criaturita, “esmallaíta perdía”, tuvo que sucumbir ante la tentación de tal manjar, cayendo en una de ellas.

Lo que más me sorprendió fue que el cazador trampero sabía que el animal era alérgico al queso fresco. Gran astucia por su parte.

A ver que le deparará la próxima vez a nuestro peculiar “Juan sin Miedo”.

Como dice Patán, el de las medallas, hay ratones que matan.

3 de diciembre de 2012

Un beso robado



Desde el día anterior ya me encontraba nervioso. Sabía que iba a estar contigo aunque fuera durante un pequeño trayecto, trayecto donde entablaría una conversación como las que a mi me gustan, las que hablan de sentimientos, de vida, de amor, de libros, de tu familia y la mía, y estaba deseando que llegara ese momento.

Hablar de ti es conocer poco a poco el feminismo, la sensualidad, la ternura, la pasión, pero no una pasión monótona, sino aquella en que necesitas descubrir cosas nuevas, e ir poniéndolas en práctica.

Tu manera de emplear el tiempo en prepararte para ser admirada, es una de las especialidades que posees, no te da pereza madrugar para llevar a efecto una atracción perfecta, y aunque tu cuerpo se ha degradado por los partos, lo intentas mantener lo mas sensual que puedes y lo logras.

Eres una mujer con mucha ternura, y entregas mucho amor, quizás a la persona que no te sabe dar lo que tú necesitas, pero te entregas con todo el corazón porque es con quien compartes tu vida, tu familia, tu hogar.

Quizás estemos en un mundo paralelo, quizás tú naciste después que yo, y ahora es demasiado tarde para cambiar, pero no me quedo con las ganas de averiguarlo, y creo que mañana será ese día.

Radiante como siempre, te acercaste a darme un par de besos, que es lo que corresponde como saludo a los amigos que se quieren, y como lo había pensado, te abrí la puerta del coche como si fueras una gran dama, que además agradeciste con gentileza el detalle, y con la sincera sonrisa que te caracteriza.

Me embriagabas con tu perfume, pero que no me faltara, y mientras me hablabas del frío que estaba haciendo, yo perdía la noción del tiempo en sentir que estaba a tu lado, algo nervioso, como una primera cita, y estaba encantado con tu presencia.

Regresé al mundo de los vivos cuando por segunda vez dijiste que tenías frío, colocándome tus manos en las mías, y preparé la calefacción para que entraras en calor, no obstante cogí una de tus manos y la coloqué en mi pecho, y después la otra, y al poco tiempo te sentías mejor, lo que dio paso a una conversación sincera que para mi fue un saludo de lo corta que me pareció.

De todo hablamos, de la vida, de la muerte, del amor, y antes de llegar al destino, paré el coche y te pedí que me dieras un beso, negándote a ello, pero lo conseguí con trampas, y si me gustó el beso, mas me gustó que me dijeras que sentías vergüenza, y te ruborizaste como una colegiala, un momento maravilloso.

Nos conocemos de hace tiempo, y sabemos como somos, o por lo menos creemos saberlo, pero nunca habíamos tratado este tema y de esta manera.

Los dos estamos pasando un trance, tu con tu marido, y yo con mi mujer, pero me revelo a seguir sin sentir lo que me das, y tu seguro que sientes lo mismo, y has visto algo en mi que te atrae, vivamos la vida sorbo a sorbo, intentando no hacer daño a nadie, desde ahora no buscaré un beso robado, deseo que coloques tus labios en los míos desplegando tu tierno amor, y yo te entregaré mi corazón que guarda el amor que será tuyo, ese amor por el que tanto suplicas y que ahora lo tienes en mi, que junto a tu ternura, esa dulce ternura que despliegas con tu mirada, revivirás una zona muerta en mi corazón.

27 de septiembre de 2012

Monólogo de un perro


Por Antonio Gala

Yo no creo haber hecho nada malo esta mañana....
Me parecieron todos muy nerviosos. Iban y venían por los pasillos, esquivándose unos a otros.
Ella le gritaba a la madre de él, y los dos niños, con las manos llenas de cosas, entraban en el dormitorio de los padres, que yo tengo prohibido.
La pequeña –la más amiga mía- chocó contra mí dos o tres veces. Yo le buscaba los ojos, porque es la mejor manera que tengo de entenderlos: los ojos y las manos. El resto del cuerpo ellos lo saben dominar y, si se lo proponen, pueden engañarte y engañarse entre sí; pero las manos y los ojos, no.
Sin embargo, esta mañana mi pequeña ni me quería mirar. Sólo después de ir detrás de ella mucho tiempo, en aquel vaivén desacostumbrado, me dijo: “Drake , no me pongas nerviosa. ¿No ves que nos vamos de veraneo, y están los equipajes sin hacer?” Pero no me tocó ni me miro. Yo, para no molestar, me fui a mi rincón, me eché encima de mi manta y me hice el dormido.
También a mi me ilusionaba el viaje. Les había oído hablar días del mar y de la montaña. No sabía con certeza qué habían elegido; pero comprendo que, en las vacaciones – y más en estas, que son más largas que las otras dos- mi pequeña podrá estar todo el día conmigo. Y lo pasaremos muy bien, estemos donde estemos, siempre que sea juntos...
Tardaron tres horas en iniciar la marcha. Fueron bajando las maletas al coche, los paquetes, la comida- que olía a gloria- y los envoltorios del último momento. Yo necesitaba correr de arriba abajo por la escalera pero me aguanté. Cuando fueron a cerrar la puerta, eché de menos mi manta. Entré en su busca; me senté sobre ella; pero él me llamó muy enfadado. – “¡Drake, venga! “ - , y no tuve más remedio que seguirlo.
Mientras bajaba, caí en la cuenta de que, en el lugar al que fuéramos, habría otra manta. Ellos siempre tienen razón. Los tres mayores, mi pequeña, su hermano y yo.... Era difícil caber en aquel coche, tan cargado de bultos; pero estábamos bien, tan apretados todos.
Yo me acurruqué en la parte de atrás, bajo los pies de los niños. La madre de él se sentó en un extremo, que suele ser su sitio, y todavía no se le habían olvidado las voces de ella, porque no decía nada; solo miraba las calles y las calles y la luz, que era muy fuerte, a través del cristal... Los niños se peleaban con cualquier pretexto esta mañana; seguían muy nerviosos. Yo sufrí sus patadas con tranquilidad, porque sabía que no iban a durar y porque era el principio de las vacaciones.
Cuando, de pronto, el niño le dio un coscorrón a mi pequeña, yo le lamí en cambio las piernas con cariño; pero ella me dio un manotazo, como si la culpa hubiera sido mía. La miré para ver si sus ojos me decían lo contrario.
Ella, mi pequeña quiero decir, no me miraba. Fue cuando ya habíamos perdido de vista la ciudad. Él se echó a un lado y paró el coche. Los de delante daban voces los dos no sé si por qué discutían o por qué. La madre de él no decía nada; ya antes había empezado a decir algo, y ella le cortó con muy malos modales. Tampoco los niños decían nada....
Él bajó del coche y cerro de un portazo; le dio la vuelta; abrió la puerta del lado de los niños, y me agarró por el collar.
Yo no entendí. Quizá quería que hiciese pis, pero yo lo había hecho en un árbol mientras cargaba y disponía los bultos. Empujó con violencia la puerta, y volvió a sentarse al volante. Oí el ruido del motor.
Alcé las manos hacia la ventanilla; me apoyé en el cristal, detrás de él vi la cara de mi pequeña con los ojos muy redondos; le temblaban los labios... Arrancó el coche, y yo caí de bruces.
Corrí tras él, porque no se daban cuenta de que yo no estaba dentro; pero aceleró tanto que tuve que detenerme cuando ya el corazón se me salía por la boca... Me aparté, porque otro coche, en dirección contraria, casi me arrolla.
Me eché a un lado, a esperar y a mirar, porque estoy seguro de que volverán por mí.......Tanto miraba en la dirección de los desaparecidos que me distraje. Y un coche negro no pudo evitar atropellarme....... No ha sido mucho: un golpe seco que me tiró a la cuneta....
Aquí estoy. No me puedo mover. Primero porque espero que vuelvan a este mismo sitio en el que me dejaron; segundo, porque no consigo menear esta pata. Quizá el golpe del coche negro aquél no fue tan poca cosa como creí....
Me duele la pata hasta cuando me la lamo. Me duele todo...
Pronto vendrá mi pequeña y me acariciará y me mirará a los ojos. Los ojos y las manos de mi pequeña, nunca serán capaces de engañarme.
Aquí estaré... Si tuviese siquiera un poco de agua: hace tanto calor y tengo tanto sueño...
No me puedo dormir. Tengo que estar despierto cuando lleguen...
Me siento más solo que nadie en este mundo... Aquí estaré hasta que me recojan . Ojalá vengan pronto.....


Esta Colaboración Anónima, es un escrito de Antonio Gala, es difícil no emocionarse con su lectura. GRACIAS.