Ayer oí la voz de varios espíritus. Os puedo asegurar que no provenían del más allá, puesto que sus palabras sonaban muy cercanas, rebosando amistad y simpatía. Poco a poco mi organismo fue ascendiendo a un nuevo universo guiado por la luz de los Espíritus de Haddock, los cuales me estaban dando la oportunidad de convertirme en uno de ellos. Halagado y encantado de poder colaborar desde dentro es como me siento desde entonces, y tengan por seguro que disfrutaré haciéndolo. No hay mayor gratificación para mí que tener la posibilidad de deleitarme en primera persona de lo que ya me encantaba hacer como colaborador. Desde hoy el espiritismo no tendrá secretos para mí, puesto que estas maravillosas ánimas me han otorgado la habilidad de comprender la relación de los espíritus con el mundo corporal. Gracias y a disfrutar.
Soy Bake Nodoyuna, este es el nombre que he elegido. En honor a Pierre Nodoyuna y su inseparable perro Patán de la serie de dibujos animados los "Autos Locos". Su coche, el Super Ferrari, siempre llegaba último a la meta, como castigo a su eterno intento de hacer trampas, algo que por desgracia no ocurre en la sociedad actual con la frecuencia que debería. Hoy en día los más tramposos suelen tener más privilegios de los que les corresponden. Así pues, para que de su recuerdo quede constancia, espero que perdure su humor que de pequeño me hizo reír tantas veces
¡Buen trabajo Patán! ¡Ahora pon la salsa picante dentro del motor!