Un señor va al médico y le dice :
-Doctor, mi esposa es frígida y no logro excitarla con nada.
El doctor saca de su botiquín unas pastillas y se las da.
-Ponga una de estas pastillas en el café de su mujer antes de acostarse y verá cómo reacciona.
Por la noche, el marido pone una de las pastillas en el café de su esposa y piensa:
- “Mi mujer es muy fría, mejor le pongo dos” .
Duda por un momento y decide ponerla otra más. Antes de acostarse, el marido vuelve a dudar:
- “Le puse tres pastillas, ¿y si ahora no estoy a la altura? Mejor me tomo yo también tres pastillas.”
A media noche, la mujer se despierta jadeando y reclama a su marido:
-¡¡¡¡Quiero un hombre!!!!
El marido gimiendo de la misma manera, le dice a su esposa:
-¡¡¡¡¡Yo también!!!!
Un Amigo o Amiga (anónimo) nos manda un poco de humor. Gracias.
Artículo reeditado: Originalmente publicado el 19 de Enero de 2011.
Artículo reeditado: Originalmente publicado el 19 de Enero de 2011.
Esto se llama homor gayne. Me preguntaba donde se ha metido mi amigo el vallecano?
ResponderEliminarUuno tiene que probar de todo. Nun se sabe lo que más te puede gustar. Abrazos.
ResponderEliminarEso te pasa por calentorro...
ResponderEliminarDe ese tipo de pastillas no tenía conocimiento.
ResponderEliminarDe pequeño oía hablar de "pastillitas para la gloria; pastillitas para el infierno" y de las pastillas juanola (creo que nada tienen que ver con las del artículo).
El artículo es muy simpático. Unas dosis de humor son necesarias; nunca vienen mal.
Gracias por tu apotación para que todos podamos disfrutar.
Muy bueno, al final se quedó compuesto y sin "novio".
ResponderEliminarCon una buena viagra todo se hubiese arreglado.
ResponderEliminarMe encanta la foto, parece una anuncio de United Colors of PENETTON.
ResponderEliminarEl mejor remedio contra la frigidez es cambiar de pareja.
ResponderEliminarDe acuerdo a lo que afirman muchos médicos, la frigidez tiene que ver a veces con la posibilidad de que sus primeras experiencias hayan sido nefastas, la deplorable situación económica, el exceso de trabajo en casa, la ausencia de valoración por parte de su entorno cercano, etc... lo que la hace no responder a las caricias de su compañero.
ResponderEliminarPero hay otras afirmaciones en las que queda de manifiesto que éstas mujeres "frígidas", respondieron en forma impresionante hacia las caricias de otro hombre. Y otras más encontraron gran placer en una persona de su mismo sexo, aduciendo que ésta pareja (homosexual) sí logró encontrar las partes más sensibles de su "escondido" erotismo.
¿Pero por qué los hombres nunca son responsables de la frigidez de su pareja y hay miles de mujeres que atiborran los divanes psiquiátricos confesándole a su médico que su pareja no sabe hacerles el amor y no se lo dicen por temor a lastimar su hombría?
La sabiduría popular hace ya unos años que ha creado una frase para ilustrarnos: “No hay mujeres frígidas, sino hombres inexpertos”.
ResponderEliminarLas mujeres siempre tienen ganas de follar sea la edad que sea, lo que ocurre es que su educación sexual es diferente con lo cual te encuentras a unas que con poco tienen suficiente y otras que necesitan 4 al día.
ResponderEliminarEn el mundo del folleteo todo es posible y relativo.
EliminarMe gusta el color rosa con pajaritos.
ResponderEliminarMachista el comentario
ResponderEliminarla frigidez se la quito yo con una buena follada
ResponderEliminarLos cacharros de la foto y las pastillas azules las receta quién yo sé.
ResponderEliminarEl deseo se consigue cambiando habitualmente.
ResponderEliminarEste artículo iría mejor como un comentario, no lo veo como artículo.
ResponderEliminarDía de descanso y nublado con lluvias; para meterse en la cama, bien acompañadito.
ResponderEliminarBillorrrrrrr!!!!!!
Uniendo la Frikidez con la frigidez sale Mariano Rajoy.
ResponderEliminarEsto de los chistes no es lo mismo que la buena poesía-
ResponderEliminarEvidentemente. En esta viña del Señor hay gustos para todos.
EliminarBueno, y mañana domingo.
ResponderEliminarTodavía quedan horas para aprovechar este sábado, así que ánimo y a disfrutar.