Te has marchado muy pronto y nunca lograremos comprender racionalmente que la parca cuando lo decide no hay combate que podamos ganar ¡Qué fina línea separa la vida de la muerte!
Es cierto que cuando una persona fallece todos, o casi todos, perdonamos y olvidamos aquellos errores que en vida se hayan podido cometer. Yo, ya los he olvidado y espero que en el lugar que te encuentres, como me comentó una amiga, nos puedas ayudar a los que aún seguimos equivocándonos, errando en nuestras decisiones o que estamos convencidos que la razón más contundente nos asiste.
Me reprocho que después de tantos años no supiera explicarte lo que siempre he entendido por compañerismo, el significado de luchar exclusivamente por dignidad profesional y que en la vida todos tenemos que saber parar, ayudar y dar paso a los jóvenes que poseen la fuerza para la construcción de un mundo mejor; nosotros debemos de aportar nuestra experiencia y la mesura en el trabajo.
No trato de filosofar, ya que el único sentimiento que me invade es la pena y una gran tristeza, pensando que no hayas podido continuar viendo crecer a tus hijos y la convivencia rota con tus seres queridos.
Ya no existen reproches, sólo el deseo de que todos reflexionemos y pensemos que mañana o pasado mañana nos puede tocar a cualquiera; rectifiquemos.
Mis años de convivencia como compañero tuyo han sido casi una vida y nunca los podré olvidar. Mi último deseo es que tu descanso sea en plena paz.
Tristeza y dolor, por tu familia, por tus amigos, compañeros… por los que ya no podrás conocer porque el destino te ha robado el tiempo.
Espero que cuando nos volvamos a encontrar tengamos toda una eternidad para hablar.
En Memoria de aliquis compañero de oculus tristes
Creo que este artículo que nos remite nuestro amigo, El Coronel Tapioca, se comenta por si solo. GRACIAS.
Leyendo este tipo de sucesos comienzo la mañana algo triste pero con más sabiduría.
ResponderEliminar¿Se refiere Tapioca a algún seguidor o colaborador del blog?
ResponderEliminarLa persona a la que se refiere el artículo la conocía personalmente aunque no trabaja en mi departamento. Le deseo de descanse en paz y mis condolencias para su familia.
ResponderEliminarNo soy muy partidaria de los artículos fúnebres sin embargo, creo que existen reflexiones que nos deberíamos aplicar. Nuestro destino está marcado y el gran problema del ser humano es que nunca sabe cuando le llegará su momento final.
ResponderEliminarSaludos para tod@s.
La muerte es la continuación de la vida. Dios es justo y sabe perdonar a todos. Tengamos fe y esperanza en el reencuentro final.
ResponderEliminar!Que se puede decir!
ResponderEliminarLa vida es un sueño, ya lo dijo el poeta, la muerte el depertar.
ResponderEliminarNo es más grande quien más espacio ocupa, sino quien más vacío deja.
ResponderEliminar"Si nada nos salva de la muerte, al menos que el amor nos salve de la vida." Pablo Neruda.
ResponderEliminarMuy buenos tus sentimientos, Tapioca.
A veces esperamos mucho de otras personas, sólo porque nosotros estaríamos dispuestos a hacer mucho más por ellos.
ResponderEliminarTapioca, tú esperabas mucho de este compañero y te falló en vida. Espero que ahora pueda ayudarte.
Hay que amarse aunque se tengan diferencias, ese tipo de cosas te hacen grande en esta vida.
ResponderEliminarEres muy grande, Tapioca.
El tiempo te va demostrando quienes valen la pena.. y quienes no
ResponderEliminarNunca juzgues un libro por su portada, las peores personas siempre vienen con apariencia de confiables pero están podridos por dentro.
ResponderEliminarSi alguien te hiere, te traiciona o rompe tu corazón... dale las gracias, porque... te ha enseñado la importancia de la confianza...!!!
ResponderEliminarLos sentimientos de compañerismo y de amor los debemos de interpretar todas las mañanas y no sólo cuando la persona querida se ha marchado.
ResponderEliminarLas reflexiones son para compartirla y las tuyas intentaré aplicarmela.
No te pares al lado de mi tumba y solloces.
ResponderEliminarNo estoy ahí, no duermo.
Soy un millar de vientos que soplan y sostienen las alas de los pájaros.
Soy el destello del diamante sobre la nieve.
Soy el reflejo de la luz sobre el grano maduro,
Soy la semilla y la lluvia benévola de otoño.
Cuando despiertas en la quietud de la mañana, Soy la suave brisa repentina que juega con tu pelo.
Soy las estrellas que brillan en la noche.
No te pares al lado de mi tumba y solloces.
No estoy ahí, no he muerto.”
Tengo pocos amigos, ¡pero cuánta amistad tengo!.
ResponderEliminarJosé Narosky
dios les bendiga por ocupar su vida en el, y poder tambien enriquecer nuestras vidas
ResponderEliminarTodos y digo todos tenemos defectos y virtudes. ahora es el momento como lo hace el artículo del Coronel Tapioca de rendir homenaje al que ha marchado por esa escalera multicolor. Yo también soy compañero del que se ha marchado y del que escribe.
ResponderEliminarSolo se me ocurre algo: no se que puedo decir, tristeza y que se encuentre en un lugar bello y nos ayude a todos los que pensamos que nunca nos tocará como dice el autor "la Parca".
ResponderEliminarno s si os habeis dado cuenta q el internet explore no publica comentarios aconsejo q s utilice otro
ResponderEliminarEl muerto al hoyo y el vivo al bollo, desgraciadamente
ResponderEliminarUn mentiroso puede engañar a muchos durante mucho tiempo...pero no a todos todo el tiempo...y mucho menos a la enfermedad y a la parca.
ResponderEliminarEl que sabe perdonar esta con Dios en paz.
ResponderEliminarSi haces algo malo reconocelo y arrepientete antes de que sea grande.
ResponderEliminarHa sido una pérdida irreparable, para todos los que tuvimos la oportunidad de compartir con él un momento de nuestras vidas (fue mi compañero, mi amigo .. ). Situaciones como esta nos demuestran día a día lo importante que es ser todo lo felices que podamos, evitando preocuparnos por aspectos que no sean realmente importantes.
ResponderEliminarLa muerte es el único destino que todos compartimos.
ResponderEliminarCuando se va alguien a quien amamos, lo más insoportable es darse cuenta de que nosotros seguimos en el mismo sitio.
ResponderEliminarCuando Dios quita a alguien de tu vida, es porque traera a alguien mejor.
ResponderEliminarNo estoy perdida, soy la perdición. No estoy maldita, soy la maldición. No puedes devolverme la vida… Soy la muerte.
ResponderEliminarMe anuncian la muerte de uno cuya presencia no me entusiasmaba y pienso: yo no pedía tanto.
ResponderEliminarLa muerte de cualquier hombre me disminuye, porque yo formo parte de la humanidad; por tanto nunca mandes a nadie a preguntar por quién doblan las campanas: doblan por ti.
ResponderEliminarJOHN DONNE
La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente.
ResponderEliminarRumores van rumores vienen pero nadie confirma... de lo que estoy seguro es que LA PARCA anda de cacería
ResponderEliminarOjala amigo Juan Ildefonso todos los compañeros fueramos amigos. Tu comenytario me ha echo emocionarme.
ResponderEliminarCada vez que un amigo fallece una nueva estrella comienza a brillar.
ResponderEliminarSoy de León y trabajo con un grupo de compañeros y compañeras que somos también amigos.
ResponderEliminarLo que hemos conseguido es difícil de conseguir y nos hemos propuesto que siempre prevalezca la amistad por encima de cargos y prebendas.
Me encantaría que en todos los puestos de trabajo funcionara el sentimiento de la amistad. Otro gallo cantaría en este país de las dos Españas.
joder que triste es todo
ResponderEliminarHay personas grises. Hoy este artículo y los comentarios te han echo relucir compañero tan cercano y tan lejos.
ResponderEliminarTampoco hay que olvidar el pasado y me refiero a los que aún siguen haciendo daño en cualquier lugar o en cualquier galaxia.
ResponderEliminarLo siento, yo olvido pero perdono.
ResponderEliminarME HAN TRATADO COMO UNA PERRA CON PULGAS
Lamento algunos comentarios. Me gustaría ser tu compañero y mucho más tu amigo seas quien seas Coronel Tapioca.
ResponderEliminarNo me gustan las squelas mortuorias pero si cuando uno saca conclusiones por el fallecimiento de otra persona.
ResponderEliminarMe quedo con la reflexión de que cualquier día nos puede tocar a cualquiera.
Seamos más bueno en toda la extensión de la palabra.
Dijo un poeta abrire la tierra a dentelladas....
ResponderEliminarEste artículo demuestra dos cosas.
ResponderEliminar1.- Que eres de las mejores personas que he conocido.
2.- Que siempre has querido a tu compañero, cuyo nombre me reservo por la intimidad que tú le has dado.
También sé que otros compañeros han jugado y siguen jugando al macabro juego del miedo, la cobardía y la traición.
parece que la mayoria de los que escriben saben de que va esto
ResponderEliminaryo no tengo idea y ai que pensar que el blog es para todos
Hasta siempre chico del boli.
ResponderEliminarCompañeros????? quizás, yo no los conozco.
ResponderEliminarNadie ha comentado que la bendición del cielo sea para los viven y sobre todo para la familia de ese compañero, amigo o persona desconocida. Todos los días unos se marchan y otros vienen. Pensemos más en los que están (aún).
ResponderEliminarOtras personas influyen a veces para que exista separación entre los compañeros de un trabajo. Seamos libres y tomemos nuestras propias decisiones; aprovechemos lo buenos momentos ya que llegará un día que otros decidiran por nosotros.
ResponderEliminarAhora me explico que varios comentarios que he realizado no se hayan publicado.
ResponderEliminarPienso que el artículo es bonito y nos ayuda a todos. La muerte es horrible para los que se quedan.
algunos nuncan le daran el valor que tiene la palabra compañero
ResponderEliminarGracias a individuos de diversa calañas se ha cargado un departamento modélico ¿Compañeros?
ResponderEliminarUn bello artículo que pone a cada uno en su sitio.
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