Cuando pienso en mi infancia, la cual no me queda muy lejos, me pongo a pensar en todas aquellas personas que hicieron que fuera una etapa de mi vida tan feliz. Entre todas estas personas se encuentra el dueño del quiosco de al lado de mi casa, Lino.
Lo cierto es que siempre ha habido y siempre habrá, una relación especial entre todo niño y el quiosquero de su barrio. Esas personas a las que ves día tras día, para obtener aquellos manjares tan exquisitos para tu paladar. Me refiero a las pipas, nubes, regaliz, palomitas, gusanitos y golosinas en general.
Lino ha sido una de las mejores personas a las que he tenido el gusto de conocer. Una persona sencilla y humilde, que te recibía siempre con una sonrisa en la cara.
Todas las mañanas se levantaba muy temprano para abrir su quiosco, al cual le tenía un gran cariño. Un hombre optimista, cercano, alegre, al que nunca vi de mal humor, una de esas pocas personas que conseguían sacarte una sonrisa por muy triste y gris que te fuera el día.
Le gente lo quería y lo admiraba, tanto que consiguió que a la plaza San José la llamaran la plaza del Lino.
Todavía recuerdo como si fuera ayer, cuando iba cada domingo en busca de un nuevo soldadito de plomo para la colección y él me lo buscaba en su coche, repleto de decenas de fascículos de todo tipo, o cuando mi padre le contaba los chistes de gallegos que tanta gracia le hacían, cuando pasábamos junto al quiosco.
Lino era una persona que amaba la vida, pero la vida no fue justa con él y le jugó un duro traspiés.
Por todo ello, le quiero dedicar este artículo, a él y a todas las personas extraordinarias, que hacen del mundo un lugar más bonito para vivir.
Solamente espero que esté en un lugar mejor y que sepa que nunca ha habido y habrá un quiosquero mejor.
Por cierto, no sé si sabéis que San Pedro dispone de un quiosco nuevo, todo blanco, todo sonrisas, desde que Lino está con él.
Hace algún tiempo, el 15/09/2010 nuestro amigo y colaborador Bake Josyan, escribió este artículo que dejó en todos, incluyendo a sus familiares, una profunda tristeza con mezcla de nostalgia por un una persona que se nos marchó, el amigo Lino, el buen quiosquero.
Ya en su artículo Josyan hablaba de que la plaza donde se ubicaba y se ubica el kiosco de Lino, todos la conocíamos como la Plaza de Lino, incluso había algún comentario que pedía que se hiciera ese cambio de nombre.
Hoy eso ya es una realidad y la antigua Plaza de san José, se ha rotulado como Plaza de Lino. Casi 2 años después, la prensa local recoge la noticia así:
"Las fiestas de San Sebastián han dado hoy su pistoletazo de salida con la celebración de varios actos centrados en la rotulación de la Plaza Lino, antigua Plaza de San José que ahora rinde un homenaje al quiosquero de esa zona, muy querido por los vecinos.
El nombre de esta plaza fue otorgado en el acto de Honores y Distinciones de la ciudad de Huelva el pasado año y esta tarde se rotula la calle en un acto que contará con la presencia de las autoridades locales y la familia de Lino. Situada en la calle San José, la plaza rinde un merecido homenaje a “un onubense cabal, alegre, trabajador; una gran persona querida y admirada por sus vecinos”, ha señalado el primer edil. “Supo ganarse con su sencillez el cariño de todos: adultos y pequeños, que se acercaban a su quiosco a comprar y para todos ellos siempre tenía un gesto amable, una palabra agradable”.
La concesión de calles a personas de Huelva, “constituye un acto de onubensismo, un reconocimiento a personas que han servido a Huelva con ilusión y devoción, como Lino. Por eso, la Plaza San José cambia de nombre para dedicársela a su más entrañable inquilino: un hombre sencillo, pero grande de corazón: una persona muy querida en todo el centro, como lo demuestran las miles de firmas recogidas por los ciudadanos para que Lino tuviera su plaza”, ha señalado, a la vez que ha indicado que ésta “es nuestra forma de darle las gracias y de hacer justicia con hombres como él, que merecen permanecer en el recuerdo y tener su espacio en la historia de Huelva”.
Para nosotros es un orgullo haber aportado nuestro granito de arena para poder conseguir este reconocimiento a nuestro gallego más onubense, a nuestro amigo Lino. Pero sobre todas las cosas, nos satisface, el haber servido de consuelo a toda la familia de Lino, porque el día de la inauguración oficial, no solo se oyeron las palabras rimbombantes de los políticos, ese día, el texto que se leyó, fue el artículo de Bake Josyan, cosas así justifican nuestra existencia.
Precioso artículo que demuestra una sensibilidad extraordinaria.
ResponderEliminarExisten profesiones a veces ignoradas y esta historia que nos cuenta Bake Josyan hace alusión a la figura entrañable de los kiosqueros o personas que poseen un pequeño kiosko y nos hacen la vida más agradable a todos y que casi siempre pasan desapercibidos. Muy buen artículo.
ResponderEliminarTus palabras sencillas y cariñosas, como siempre, me han emocionado mucho.
ResponderEliminarYo tuve la suerte de conocer a Lino y Bake Josyan lo describe perfectamente. Un gran tipo, un hombre amable y maravillosos. El artículo me ha emocionado.
ResponderEliminarLindo, lindo como todo lo que escribes
ResponderEliminarEl bueno de LIno recibe tu artículo con una sonrisa muy amplia en ese lugar que seguro será mejor que el que vivimos.
ResponderEliminarTe quiero Josyan, no cambies.
ResponderEliminarMi sorpresa ha sido mayúscula cuando he leído el artículo de Josyam.
ResponderEliminarYo también conocí a LINO, todo un caballero e igualmente conozco a su familia, una familia donde las haya, amables y unas bellísimas personas.
Resulta bonito y conmovedor estas frases dedicada al amigo Lino.
Toda la comunidad te extrañábamos. Buen regreso amigo Josyan y que sigan tus muy buenos artículos.
ResponderEliminarSoy propietario de un kiosco en Madrid. A veces leo vuestro blog y hoy ese jovencito me ha echo llorar. Tengo tantas vivencias iguales que las descritas que me siento totalmente identificado con el Sr. Lino, en paz esté.
ResponderEliminarEres genial Josyan, bonito artículo a Lino, fuimos muchos los que les conocimos. Gran reconocimiento a ese hombre que dedicó muchos años de su vida a pequeños y mayores.Besos
ResponderEliminarMe has emocionado. Tuve la suerte de estar entre las personas que conocimos a Lino. Era impresionante verlo todas las mañanas montando desde bien temprano su quiosco y cuando empezaba el paso de los niños hacia los colegios no dejaba de arrancar sonrisas a todos ellos.
ResponderEliminarAllá donde esté, Descanse en paz.
Por muy malhumorada que estuviera, recuerdo que Lino siempre era capaz de hacerme sonreir. Me ha encantado el artículo. Enhorabuena, Josyan
ResponderEliminarMaravilloso artículo que sólo puede salir de una mente pura como el colaborador Josyan.
ResponderEliminarEl bueno de Lino, su sonrisa siempre fue el baluarte de todos los niños y de los que ya no somos tan niños. Descanse en paz.
ResponderEliminarNo conozco al tal Lino pero el artículo está lleno de sensibilidad y amor. Seres humanos con esta provocación de esplendor de amor son los que deben de gobernar el paraíso, allí donde está tu amigo Lino.
ResponderEliminarSoy habitual de este kiosco y me entero por el blog de que este hombre tan bueno ha fallecido.
ResponderEliminarNo tengo palabras para describir como me siento.
Precioso, de verdad.
ResponderEliminarSólo él sabía convertir un día nublado en soleado. Gracias Lino por tu simpatía y amabilidad. Descansa en paz.
ResponderEliminarJosyan, eres el mejor.
Gran detalle el haberos acordado de esta gran persona y hacerle este pequeño gran homenaje.
ResponderEliminarPersonas buenas las hay en todas las profesiones.
ResponderEliminarel kiosco de la simpatía, mi adorable Lino, mi gallegito.
ResponderEliminarLa Plaza San José ya nunca tendrá la alegría de antaño. Gracias, Lino por haber existido.
ResponderEliminarYo no tuve el placer de conocerle pero puedo asegurar con conocimiento de causa, que la mayoria de los que estamos en un kiosko no le vamos a la zaga. Sera que devolvemos a la gente lo que nos dan, cariño, confianza y respeto.
ResponderEliminarDespués de leer los comentarios anteriores no se que decir.
ResponderEliminarLino fue una persona maravillosa y el chico que escribe estas vivencias lo dice todo y si el mundo fuera Lino el mundo sería el paraíso.
Yo tengo 18 años y he vivido todo lo que dice el colega en su artículo; el sr. LIno era una persona que nunca fue mayor siempre fue joven y lo sige siendo, este donde este.-
ResponderEliminarTodos estamos de luto y también de alegría: Lino ha montado un kiosco para todos los buenos que lleguen al Cielo. Gallego espérame y hazme un hueco cuando yo llegue.
ResponderEliminarEsto es demasiado, no quiero llorar más.
EliminarSolo puedo decir gracias y estoy llorando.
ResponderEliminarDesde Chile donde los kioskeros son ambulantes me uno a la emoción y amor que ha sentido ese pibe por un amigo. Aquí decimos que el amigo siempre te acompaña cuando fallece y se convierte en una pluma de tu ángel custodio,
ResponderEliminarLino fue todo un ejemplo del hombre bueno que todos llevamos de niño y que en él no cambió con el paso de los años, era el más niño, el más jovial, el mejor. Mi admiración por él quedará para siempre y todos los días cuando paso por su kiosco lo sigo viendo colocando sus revistas, con su gorro de invierno y su semblante de un hombre trabajador que se ha marchado cuando el Dios de los justos ha creído conveniente; seguro que como dice nuestro amigo Bake Josyan en el cielo necesitaban un nuevo kiosco de chuches y lo han llamado a él por ser el más bueno.
ResponderEliminarSolo por este artículo merece ser seguidora de este blog. Gracias amigo autor que demuestra una sensibilidad que muchas personas han olvidado. La vida y la muerte van unida pero tu propugna y estas lleno de vida y la vida debería de ser amor, amor, mucho amor, sólo amor.
ResponderEliminarEscribo en nombre de un amigo que hoy no lo puede hacer por estar algo fastidiado. Me consta que el quería y admiraba a nuestro amigo Lino.
ResponderEliminarEstoy seguro que cuando se recupere el dirá lo que siente pero yo de momento y con sus palabras "mi querido gallego" quiero unirlo a este sencillo y bonito homenaje que un familiar suyo ha escrito.
Me ha gustado mucho, mucho, mucho.
ResponderEliminarLa profesión de quiosquero no es una profesión muy reconocida.- Yo tengo un pequeño quiosco ambulante y cuando he llegado a casa he leído porque un amigo me lo había indicado este artículo. Sólo puedo decir gracias en nombre de todos y gracias a ti muchacho (he visto tu perfil), por hacernos sentirnos útiles y reconocer la labor que en nombre de este señor fallecido realizamos. Gracias por todos y para todos vosotros.
ResponderEliminarAlgunos se educaran y otros mentirán pero todos adoraran al rey de las chuches. Tio me ha flipao con esta anomalía de tu sentidos más ocultos.
ResponderEliminarSi no apruebas te damos matrícula de honor y Lino seguro que esta de acuerdo.
Colegita eres el mejor
Mi preferido papito, lindo y esperanza de un mundo mejor, el mio el tuyo y el de todos los santos buenos.
ResponderEliminarSOY UN FAMILIAR DE LINO Y ME DIRIJO A TODOS LOS QUE HAN COMENTADO EL ARTICULO, PARA DAROS MI SINCERO AGRADECIMIENTO Y EN ESPECIAL A BAKE JOSYAN
ResponderEliminarGRACIAS DE TODO CORAZÓN.
Otro comentario: Que bello es la dulzura de la caña de azúcar que se cimerrea con el corazón.
ResponderEliminarRecuerdo la primera etapa de Lino en el pasaje, subida y bajada de revistas y fascículos. Siempre su esposa callada y ayudándolo. Lino ponía la picaresca, ella sus buen hacer.
ResponderEliminarYo hoy me siento aludido, me siento feliz, recuerdo de gente sana y buena. Hoy es un día especial.
ResponderEliminarTodos deberíamos aprender algo de este bello artículo, lástima que sólo dure lo que dura las sensaciones y mañana sea otro día y ya el sentimiento se oculte bajo la cotidianidad.
ResponderEliminarHay muchos Linos en todas las profesiones. El homenaje debe de ser más extenso. No digo más porque cierran el kiosco.
ResponderEliminargracias
ResponderEliminarGenial el artículo. Josyan lo crea partiendo del amor y así es todo emocionante aunque no fuera verdadero que no dudo de que lo será.
ResponderEliminarDe lo más bonito que se ha escrito en este blog y en otros que sigo. Preciosa historia de un chico con su amigo kioskero y su homenaje. Maravilloso.
ResponderEliminarAyer leí este artículo y no fui capaz de escribir nada.
ResponderEliminarCompro el periódico todas las mañanas en el Kiosco de Lino y desde que él no está es como si las mañanas tuvieran otro color.
Un gran profesional y mejor hombre.
Mi homenaje y pésame a sus familiares.
Un detallazo y una alegría que los jóvenes se aproximen a los mayores de esta forma tan bonita.
ResponderEliminarNo pararemos hasta que la plaza San José se convierta oficialmente en PLAZA DEL LINO; luchemos todos para conseguirlo.
ResponderEliminarLo hemos conseguido; al final la justicia divina hace que la plaza de Lino tenga su propio nombre, se lo merece, y lo digo en presente.
EliminarMi nombre es Alberto y como soy pequeño aún, esta carta la escribe mi papa para enviarle a mi amigo Lino un fuerte beso en el Cielo.
ResponderEliminarPequeño, no me hagas llorar más, por Dios.
EliminarGracias a todos que os habéis acordado de nuestro amigo y familiar Lino. Un fuerte abrazo para esa comunidad que formáis bajo la siglas de este blog que al tener este tipo de detalles explica las visitas que ya tiene acumuladas.
ResponderEliminarGracias principalmente al autor que ha demostrado ser un buen amigo de Lino. Seguro que tu amigo Lino ya esta disfrutando de la Gloria del Señor.
Gracias a todos.
Les confieso a ustedes sin rubor que tengo en mayor estima al noble oficio de kiosquero que al de eso que a veces interpretamos, sin serlo, como librero, en tanto que el kiosquero sabe perfectamente que él sí que es un tendero de la prensa en color y blanco y negro y cuida su puestecillo con ese amor y ese orden con que el pescadero o el frutero despliegan ante nosotros la cara más apetecible de su mercancía.
ResponderEliminarY súmenle ustedes las horas de pasarte la vida dentro de una garita, rodeado de papeles y de cartones y de plásticos, al frío cuando hace frío y torraditos de calor cuando casi siempre, complementando la labor de difusor mediático con la de colaborador inconsciente de los dentistas y dietéticos infantiles con la venta de chucherías, papasfritas y golosinas, o las estampas de la liga que ya los ansiosos no compran por sobres, sino por cajas.......
(ELOGIO AL KIOSQUERO)
Genial comentario.
EliminarRecuerdo el antiguo kiosco de Lino, sus amarres, la pared del pasaje decorada con todo tipo de colores y figuras. Alli estaba el bueno de LIno descolgando, colgando, explicando, sonriendo, siempre sonriendo. Que injusta es la vida. De allí pasó a su nuevo kiosco, orgulloso de poder atender mejor a todos y entre todos destacaban los niños, como lo querían como quería el a todos y conocía el nombre de cada uno. Que bonito y que triste. Este artículo seguro que nos ha emocionado a muchos, incluso a personas que no lo llegaron a conocerlo y por eso quiero decirte a ti B. Josian que lo has escrito que has sido el portavoz de muchos sentimientos de muchas palabras y silencios y que tú con tu amor ha sabido plasmar y hacernos sentir a todos mejor con este pequeño homenaje. Gracias a ti y a los que haceis posible que este libro virtual funcione. Mil gracias.
ResponderEliminarMe uno a la solicitud de cambio de nombre de la Plaza. Lino se lo merece.
ResponderEliminarAl llegar al kiosco del Lino (conocido en mi familia como el portugués, pese a ser gallego el pobre) empecé a buscar entre los numerosos periódicos. Lino tiene su emplazamiento en la desembocadura del pasaje con la calle San José, en una placita la mar de concurrida. Ha sido siempre famoso por colgar, en su día, miles de fascículos atrasados y nuevos en un muro próximo al kiosco. Hoy ya no hace falta. Los avances en los prefabricados es lo que tiene.
ResponderEliminarComo decía buscaba entre los periódicos, sin mucha esperanza, Público. Los 250.000 ejemplares me daban la impresión de que no iban a llegar a Huelva. Cuando desanimado le pregunté a Lino si tenía el periódico nuevo, me miró con cara rara y me dijo “sí, mira ahí abajo. Quita el ABC que tiene encima”. Obediente, desenterré el nuevo medio, recogí el DVD de regalo y pagué los 50 céntimos de rigor, creyendo contribuir a una buena causa.
(pasaje escrito en Cafe Meletti)
Precioso artículo lleno de sensibilidad y de amor. El chico que recuerda al kiosquero, no es habitual. Muy bonito.
ResponderEliminarHe leído todos los comentarios de este artículo y la verdad es que la variedad me lleva a la conclusión de que ha calado en muchos corazones.
ResponderEliminarYo que no conozco a los protagonistas de la historia he de reconocer que también he sentido un sentimiento especial hacia esa pareja formada por el chico y el kioskero.
Podría ser que tuvieras vocación de kiosquero. Fuera de broma lo has bordado Josyan.
ResponderEliminarSentimental, emocionante, como la vida misma cuando existe amistad y dulzura en el trato. El bueno y simpático de Lino era así, amable y paciente. Bake Josyan seguro que es un chico que supo apreciar ese trato y hoy lo recuerda y nos recuerda que un hombre bueno se marchó hacia un lugar mejor.
ResponderEliminarNo se que más decir después de todo lo que en este especial artículo se ha dicho. Descanse en paz el bonachón de Lino y a ti Bake Josyan mis respetos por contarnos unas historia real y expresarla de una manera tan dulce como lo has hecho.
ResponderEliminarEste tipo de historias REALES se suele dar con habitual frecuencia y lo que pasa es que entra dentro de las pequeñas historias que el mundo actual y la sociedad no se para tan siquiera a escucharlas o observarlas.
ResponderEliminarLuego hay que saber escribirlas para que llege a las personas de buena voluntad y espiritu abierto.
Hoy cuando leo este artículo me siento también kioskero y me siento escritor. Es una historia bonita y un lamento de la amistad cuando uno de los amigos se ha marchado.
ResponderEliminarPrecioso.
ResponderEliminarLindo, lindo, lindo.
ResponderEliminarTener un amigo como tú es un orgullo y tenerte en este blog como colaborador creo que para todos es un aliciente para visitarlo. Muy sincero y emocionante.
ResponderEliminarUn orgullo para esta profesión poco valorada o nada. Gracias muchacho.
ResponderEliminarHomenaje para los que se van, los mejores, las personas humildes y buenas. Bravo, bravisimo por el artículo o mejor la historia real que se repite todos los días en cualquier parte.
ResponderEliminarhola a todos me a encantado el articulo que esta escrito sobre mi padre porque dice todo lo que representaba. yo lo voy a echar mucho de menos porque solo soy un crío de 19 años y me hacia todavía mucha falta mi padre pero se que debe encontrarse en un lugar mejor y espero que este bien allí. Muchas gracias a todos por el apoyo a mi padre "papa allí donde estés nunca te olvidare"
ResponderEliminarlo primero decir gracias a la persona que escribio esto.
ResponderEliminarsoy un familiar de lino.
yo tambien lo recuerdo con su sonrisa siempre en la cara,contando chistes,nunca tenia malas caras pa los demas.estoy muy orgulloso de ser sobrino de esta gran persona.tio gracias por aver existido.estes donde estes siempre te tendre a mi lado y siempre te recordare.
te quiero mucho tio.descansa en paz.
Acabo de llegar a casa después de trabajar 12 horas y cerrar mi kiosco.
ResponderEliminarBuscando otro tema he llegado a este blog y a este artículo.
Me he sentido identificado.
Me he emocionado.
Y hoy que he tenido un mal día cambio mi semblante y pienso que existen personas muy buenas y mañana volveré a sonreir y dar gracias a Dios.
Quizás amigo exista un cielo con kioscos y tu amigo ya este en uno de ellos.
Desde el Cielo en una plaza que se llama "Plaza de los hombres buenos" y junto a un Kiosco blanco y celeste el ángel que lo atiende se llama Lino y él que ya lo ve todo simplemente sonrie y os dice que se encuentra en un lugar maravilloso y desde allí seguirá cuidando de todos vosotros.
ResponderEliminar¡Qué bonito!.
EliminarEn un día como hoy confieso que si el artículo me ha emocionado los comentarios más. Yo algún día quiero encontrarme con todos vosotros personas buenas y si es posible en el KIOSCO DE LINO.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a todos y especialmente a sus familiares.
Que Lindo
ResponderEliminarSi existe en el blog un corazón puro y lleno de amor yo voto por este colaborador que el pijotero me ha echo llorar. Yo también conocía a Lino, soy gallego.
ResponderEliminarLos comentarios son todos preciosos y llenos de amor.
ResponderEliminarEl amor es más intenso coando se forma una comunidad.
Me habían comentado lo del artículo de vuestro blog y la verdad que me costado trabajo encontrarlo. Ha merecido la pena. Lino era amigo y una persona buena como pocas. La persona que escribe el artículo comparte mis sentimientos y seguro que allí donde esté te mirará y sonreirá. A sus familiares les queda el recuerdo y estos detalles que son homenajes de amor y amistad.
ResponderEliminarTenéis un nuevo seguidor desde hoy.
FELIZ donde estés amigo Lino.
ResponderEliminarQue bonito chico, me has emocionado y hoy creo más en la juventud. Este amigo tuyo te va a llenar el año de emociones, y alegrías. Besos.
ResponderEliminareste viernes la plazita donde esta situado el quiosco de esta gran persona empezara a llevar su nombre.
ResponderEliminarPara información de toda la comunidad: Se ha aprobado en Huelva poner el nombre de Lino a una plaza. Todos te recordamos amigo.
ResponderEliminarLo de la plaza debería de ser extensivo a muchos trabajadores anónimos que hacen mucho más por el pueblo que personajes intelectuales y gentes del famoseo. Bravo por la iniciativa.
ResponderEliminarUna alegría inmensa para todos y especialmente para su familia. Lino fue sobre todo un buen hombre.
ResponderEliminarGran amigo y de su familia. Lino una persona encantadora y un trabajado de los que quedan poco. Estuvismos, lloramos y nos reimos. A partir de ahora es y será La Plaza de LINO.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a todos.
¿Qué es un ‘jökulhlaup’?
ResponderEliminarEs el nombre islandés que reciben las enormes corrientes de agua que se desatan en los glaciares cuando se derriten
El volcán que está debajo del glaciar Eyjafjalla despertó después de 90 años.
Es el nombre islandés que reciben las enormes corrientes de agua que se desatan en los glaciares cuando se derriten. Pero ahora se usa en general para todos los fenómenos derivados de cambios bruscos en los glaciares, como grandes desprendimientos, aludes y corrientes bajo el hielo.
Los vimos hace poco tras la erupción del volcán Eyjafjalla (Islandia), cuyas cenizas mantuvieron colapsado el tráfico aéreo. El calor del magma desencadenó derretimientos del hielo bajo el que se asentaba. El Gobierno islandés tuvo que evacuar una población de 800 personas cercana al volcán para salvarla de las inundaciones que provocó el Eyjafjalla.
La historia es para enmarcarla, emotiva, preciosa.
ResponderEliminarEstos son motivos para seguiros todos los días.
Conocía el artículo y ahora que tengo oportunidad os felicito y me alegro que se reconozca la labor de un trabajador con la rotulación de un plaza, su plaza.
ResponderEliminarCuatro italianos que van a un bar en España y piden 4 coca colas laigt al camarero.
ResponderEliminar- Lo siento, responde el traidor, sólo nos queda 4 coca colas 0
Me alegro, no conozco la historia ni a las personas pero según el artículo me alegro mucho que se vea una labor reconocida de un trabajador. Por una vez no ha sido con concejero de Bamkia o especie similar.
ResponderEliminarEl articulo del amigo de Lino, Bake Josiam precioso la aportación posterior muy buena y la plaza seguro que es un lugar de reunión de sus amigos los más peque.
ResponderEliminarSiempre recordare al bueno del amigo Lino el quiosquero con su sonrisa eterna y su buen humor.Reeditar el articulo con su plaza es todo un acierto.
ResponderEliminarLerlo me ha emocionado mucho. Besos paratodos.
ResponderEliminarLos políticos inaguran calles y plazas para salir en los medios de comunicación.
ResponderEliminarLos ciudadanos apoyamos iniciativas populares por amor y respeto.
Decidan ustedes.
Buen lunes con este articulo
ResponderEliminarUna máquina puede hacer el trabajo de 50 hombres corrientes. Pero no existe ninguna máquina que pueda hacer el trabajo de un hombre extraordinario.
ResponderEliminarEnviar frase
Elbert Hubbard (1856-1915) Ensayista estadounidense.
Ayer alegría a raudales, españa, españa, hoy la pura realidad de un país que se debate en la debacle y cada día es más pobre. Gracias políticos por apoyar a las personas trabajadoras aunque no tengamos trabajo.
ResponderEliminarRecuerdo cuando era chico y llegaba al kiosco de Lino con la mano llena de moneditas y le decía: "deme todo esto de caramelos". Y me iba cargadito de chucherías de las mejores. Gran Lino y grande Josyan por recordarlo tan entrañablemente.
ResponderEliminar¡La de chuches que hemos comprado ahí! ¡Qué gran kiosquero Lino!
ResponderEliminar¿Terminará Rajoy subiendo los chuches de los niños ???
ResponderEliminarIniciativas como esta son las que ponen sonrisa a la vida. En el cielo Lino hoy y todos los días estará regalando chuches y sonrisas.
ResponderEliminarMenuda alegría le daba Lino a esa plaza. La verdad es que es un reconocimiento merecido el llamar a la Plaza con su nombre.
ResponderEliminarLo de Campeones de Europa es para camuflar la subida del IVA, LUZ, GAS, no? Es que este Rajoy tiene unas ideas...
ResponderEliminarNo es por fastidiar, pero desde hoy repagamos medicamentos, un 6% más en el butano,un 4% en la luz y un 2% en el gas. Eso sí, somos Campeones
EliminarMe parece muy emotiva la reedición de este artículo. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarJosyan, no sé qué más decir sobre Lino. Tú lo has dicho todo y de una forma preciosa. ¡Enhorabuena por tu artículo!
ResponderEliminar¡Ayyy, qué lindo lo que escribiste! ¡Cuánta sensibilidad!
ResponderEliminarLa vida es como una paleta de helado, si la disfrutas se acaba y si no tambien.
ResponderEliminarAyer toda España se echó a la calle para celebrar el triunfo de la selección. Hoy podéis hacer lo mismo para luchar por vuestros derechos.
ResponderEliminar... porque no pasa nada, la gente muere en las calles, no tienen dinero para comer ni medicamentos... Pero somos campeones de Europa.
Eliminar¿Os acordais que han subido la luz, el gas y pagáis más por los medicamentos a partir de hoy, no? ¿Y seguis cantando "yo soy español"? ¡¡¡¡Qué listos!!!
EliminarEste cachondo gallego y onubense. A veces no creo en Dios ya que se lleva a los mejores
ResponderEliminarMuchos quisimos estar en ese acto pero no pudimos. Lino ya tienes tu plaza, la de todos los niños y mayores que te queríamos y siempre estará en nuestro recurdo.
ResponderEliminarSiempre has demostrado una gran sensibilidad, Josyan. Eres el más grande.
ResponderEliminarMe ha encantado esta historia y aunque sea dolorosa tenemos que sacar un aspecto positivo. A veces los buenos ganan. Me uno a una persona que no he conocido pero por el articulo y los comentarios era, como dicen los más pequeños, guay del Paraguay.
ResponderEliminarEste es uno de esos bellísimos recuerdos de mi infancia. Ir al kiosco de Lino con mi padre y charlar un ratito con él.
ResponderEliminarJosyan, ¡viva la madre que te parió!
ResponderEliminarPrecioso regalo para la familia, y un bonito detalle del blog.
ResponderEliminarCada día te quiero mas Bake Josiam
ResponderEliminarHay recuerdos que no se olvidan nunca. A Lino nunca lo olvidaremos.
ResponderEliminarTienes un gran corazón.
ResponderEliminarLo del Kiosco en el Cielo me ha encantado. Estupendo, Josyan.
ResponderEliminar¡Qué gran kiosco y qué grande su kiosquero! Esa plaza ya no es lo mismo sin Lino.
ResponderEliminarBonito homenaje para el mejor kiosquero que ha tenido Huelva. ¡Olé, Josyan!
ResponderEliminarMuchas gracias josyan por este bonito articulo, yo también conocía a Lino.
ResponderEliminarNO TENGO PALABRAS....
ResponderEliminarAmigo Lino allí donde te encuentre te verán con una sonrisa interminable y con una bolsa de chucherias que nunca se acabarán para los niños que ahora son tus ángeles.
ResponderEliminarLa situación chunga a todos los niveles económicos pero la historia nos anima para que haya menos políticos y mas personas buenas.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho leer el artículo,es maravilloso tener un amigo y no importar la edad,ya que todos tenemos ese niño pequeño dentro del corazón.
ResponderEliminar"Que no te extrañe ver un soldadito de plomo cuando te despiertes,seguro que habra sido enviado por un ángel de parte de Lino."
Besos.
Lino era mi amigo Lino era una de las personas más amable que he conocido. Es un orgullo para sus familiares y para todos los onubenses que una plaza lleve su nombre
ResponderEliminarSu recuerdo y su sonrisa serán nuestro permanente recuerdo. Su honestidad nuestro reflejo para intentar ser cada día mejor.
Me ha gustado muchísimo.
ResponderEliminarMe ha gustado más que la primera vez que lo leí. Precioso.
ResponderEliminarLino, nunca te olvidaremos y ya tienes tu Plaza. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarLino, qué gran trabajador. Qué gran persona. Único en su gremio. Suerte haberlo conocido. Descanse en paz.
ResponderEliminarCon su sonrisa y su simpatía iluminaba los días más nublados. Recuerdo cuando comenzaba a llover y él se apresuraba a cubrir con plástico todas sus revistas. ¡Qué maña tenía! No se le mojaba ni una.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo para todos los angeles del señor.
ResponderEliminarTuve la fortuna de conocer a Lino. Muchas veces, junto a mi queridísimo Josyan y su padre, parábamos para saludarle y contarle los últimos chistes. Su risa era muy característica.
ResponderEliminarTodo sobre él se ha dicho en esta reedición.
Hablando en singular, me siento muy feliz porque esa plaza reciba su nombre.
Sólo decir que sus familiares siempre podrá contar con los miembros de este blog para lo que necesiten.
Estés donde estés, amigo Lino, te mando un fuerte abrazo.
Hola me presentare: soy La Plaza de Lino. Siempre me llamaron de esa manera pero me siento muy contenta de que por fin luzca un letrero azul con el nombre de mi mejor amigo.
ResponderEliminarRecuerdo su llegada y rápido me cautivo. Con él llegaron los niños, la risas, los juegos y ya sabéis que para una plaza es muy importante la alegría, la vida.
Ahora él no está pero sigue su quiosco y continua el bullicio y también la sonrisa melancólica de su viuda.
Me siento algo triste pero también alegre ya su nombre y yo perduraremos casi una eternidad.
Precioso.
EliminarEste artículo o historia real debería servir de ejemplo para todos. Valores como la amistad y la solidaridad, escasos en la actualidad, brota en este blog a raudales.
ResponderEliminarEsta historia es para hacer un libro.
EliminarNo te olvidamos.
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