INGREDIENTES:
- 1 conejo grande
- 6 patatas medianas
- 4 dientes de ajo
- 1/2 hoja de laurel
- Caldo
- Harina
- Vino blanco
- Perejil
- Tomillo
- Aceite
- Sal.
PREPARACIÓN:
Se corta el conejo, una vez limpio, en trozos de tamaño medio (conservando su hígado), se sazona con ajo y se reserva por espacio de 30 minutos.
Transcurrido este tiempo, se sala y se rehoga en una cazuela de barro con un chorro de aceite caliente hasta que esté dorado.
A continuación, se añaden dos ramas de perejil picadas, el laurel, una cucharada de harina desleída en un vaso pequeño de vino, una taza de caldo y un poco de tomillo. Se tapa y se deja cocer a fuego lento por espacio de media hora.
Se agregan entonces las patatas peladas y troceadas en cuadraditos y el hígado del conejo machacado en el mortero con un poco de sal; se remueve un poco el guiso y se cuece 30 minutos más o hasta que el conejo esté tierno. Se sirve muy caliente.
Pablo nos regala otra de sus recetas. GRACIAS.
Artículo reeditado: Originalmente publicado el 19 de Octubre de 2012.
Artículo reeditado: Originalmente publicado el 19 de Octubre de 2012.
Yo el higado se lo quitaría.
ResponderEliminar¿La fuerza centrífuga de la Tierra podría hacernos flotar?
ResponderEliminarSi la Tierra rotase más rápido y la fuerza centrífuga se igualase a la atracción gravitatoria.
Si la Tierra rotara más rápido, y la fuerza centrífuga pudiera igualarse a la atracción gravitatoria, sí ocurriría.
Otro modo: si el planeta rotara tan rápidamente que en su superficie se consiguiera la velocidad orbital (aquella a la que el cuerpo estaría en órbita en torno a la Tierra, como un satélite artificial) cualquiera dejaría de sentir el peso y quedaría flotando en el aire.
¿Y cuánto es eso? Tanto como lograr que la Tierra diera casi media vuelta por minuto.
Estos cálculos valen para el Ecuador, donde la velocidad de rotación es máxima.
Conejo pero de otro tipo me comería yo.
ResponderEliminarQue buena pinta tiene y no parece complicado. Me lo copio con vuestro permiso
ResponderEliminarUn saludo
Conejo grande ande o no ande.
ResponderEliminarPoca olla para receta tan suculenta amigo Sancho.
ResponderEliminarOdio el conejo. Esta receta no la probaré. ¡Qué asco!
ResponderEliminarPrimer sintoma para que un "Hombre" le pegue a una mujer es el maltrato Verbal. Aprendan a tratar a las mujeres como se debe Hijos De Putaa!!
ResponderEliminar¡Una pinta tremenda la que tiene esa carne!
ResponderEliminarDecididamente cambiaré el conejo por pollo y espero que me resulte con un aspecto tan magnífico
ResponderEliminarBuenos cocineros en el blog, un lujazo.
ResponderEliminarTiene buena pinta aunque yo soy un cocinero negado.
ResponderEliminarMe quedo con el conejo casero.
ResponderEliminarCuando veo un conejo, le quiero comer la boca.
ResponderEliminarMe gustan más las recetas con imágenes, las que se han publicado últimamente.
ResponderEliminarTengo un Maná-Maná que tiene cara de conejo cabrón. Mi consejo es muy simple, consumir su carne pero no su espíritu maligno.
ResponderEliminarAparenta ser un político.
Eliminar¿Tan malo es?.
Tengo un conejo que lo quiero más que a mi corazón, poro el jodido tiene tela de guasa, come hasta mortadela con aceitunas.
ResponderEliminar¡Cómo me lo voy a comer!.
Dicen que Rajoy no come conejo.
ResponderEliminarPor eso tiene una barba que se parece al chivo de "La Huerta Mena".
Diana, Apolo, existe un conejo político que lo único que hace es dar por culo.
ResponderEliminarNecesita vuestra presencia para echarle un puñaito de arroz.
Qué es la huerta Mena?
ResponderEliminarLos conejos son muy agradecidos, se pueden comer de cualquier forma.
ResponderEliminar(Sugerencia: se pueden apartar los pelos).
El conejo que más me gusta es el de la Lole.
ResponderEliminarEl conejo más famoso es el de Ángela Merkel, se llama "Julandra".
ResponderEliminarSoy cocinero, experto en rumiantes. ¿Hoy toca conejo?. Menos mal, no me ha dado tiempo de comprar una sartén para elefantes.
ResponderEliminarEsto de las recetas es un coñazo.
ResponderEliminarTodos los conejos son iguales.
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