22 de junio de 2011

Cerrando Puertas

Paulo Coelho
 
Poner fin a un ciclo, cerrar puertas, concluir capítulos… no importa el nombre que le demos, lo importante es dejar en el pasado los momentos de la vida que ya terminaron. ¿Me han despedido del trabajo? ¿Ha terminado una relación? ¿Me he ido de casa de mis padres? ¿Me he ido a vivir a otro país? Esa amistad que tanto tiempo cultivé, ¿ha desaparecido sin más? Puedes pasar mucho tiempo preguntándote por qué ha sucedido algo así. Puedes decirte a ti mismo que no darás un paso más hasta entender por qué motivo esas cosas que eran tan importantes en tu vida se convirtieron de repente en polvo. 

Pero una actitud así supondrá un desgaste inmenso para todos: tu país, tu cónyuge, tus amigos, tus hijos, tu hermano; todos ellos estarán cerrando ciclos, pasando página, mirando hacia delante, y todos sufrirán al verte paralizado. 

RECUERDOS. Nadie puede estar al mismo tiempo en el presente y en el pasado, ni siquiera al intentar entender lo sucedido. El pasado no volverá: no podemos ser eternamente niños, adolescentes tardíos, hijos con sentimientos de culpa o de rencor hacia sus padres, amantes que reviven día y noche su relación con una persona que se fue para no volver. No podemos ser empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros. ¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir! Todo pasa, y lo mejor que podemos hacer es no volver a ello. Por eso es tan importante (¡por muy doloroso que sea!) destruir recuerdos, cambiar de casa, donar cosas a los orfanatos, vender o dar nuestros libros. 

Todo en este mundo visible es una manifestación del mundo invisible, de lo que sucede en nuestro corazón. Deshacerse de ciertos recuerdos significa también dejar libre un espacio para que otras cosas ocupen su lugar. Dejar para siempre. Soltar. Desprenderse. Nadie en esta vida juega con cartas marcadas. Por ello, unas veces ganamos y otras, perdemos. No esperes que te devuelvan lo que has dado, no esperes que reconozcan tu esfuerzo, que descubran tu genio, que entiendan tu amor. 

Deja de encender tu televisión emocional y ver siempre el mismo programa, en el que se muestra cómo has sufrido con determinada pérdida: eso no hace sino envenenarte. Nada hay más peligroso que las rupturas amorosas que no aceptamos, las promesas de empleo que no tienen fecha de inicio, las decisiones siempre pospuestas en espera del "momento ideal". 

La vida está para adelante, nunca para atrás. Si andas por la vida dejando puertas abiertas "por si acaso", nunca podrás desprenderte ni vivir lo de hoy con satisfacción. ¿Noviazgos o amistades que no clausuran?, ¿Posibilidades de regresar? (¿a qué?), ¿Necesidad de aclaraciones?, ¿Palabras que no se dijeron?, ¿Silencios que lo invadieron? Si puedes enfrentarlos ya y ahora, hazlo, si no, déjalos ir, cierra capítulos. Dite a ti mismo que no, que no vuelven. Pero no por orgullo ni soberbia, sino, porque tú ya no encajas allí en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio. 

Tú ya no eres el mismo que fuiste hace dos días, hace tres meses, hace un año. Por lo tanto, no hay nada a qué volver. Cierra la puerta, da vuelta a la hoja, cierra el círculo. Ni tú serás el mismo, ni el entorno al que regresas será igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático. Es salud mental, amor por ti mismo, desprender lo que ya no está en tu vida.
DEJARLO IR. Antes de comenzar un nuevo capítulo hay que terminar el anterior: repítete a ti mismo que lo pasado no volverá jamás. Recuerda que hubo una época en que podías vivir sin aquello, sin aquella persona, que no hay nada insustituible, que un hábito no es una necesidad. 

Puede parecer obvio, puede que sea difícil, pero es muy importante. Cerrar ciclos. No por orgullo, ni por incapacidad, ni por soberbia, sino porque, sencillamente, aquello ya no encaja en tu vida. Cierra la puerta, cambia el disco, limpia la casa, sacude el polvo.
 
Deja de ser quien eras, y transfórmate en el que eres…Esa es la vida…

Nuestra amiga Fabiola Sandoval, nos remite este vÍdeo del gran literato brasileño, Paulo Coelho, del que nos dice que sus libros son buenos para el espíritu, y siempre sus palabras son sabias, aunque a veces habla en parabólas. GRACIAS, Fabiola.

23 comentarios:

  1. Muy bonito el artículo y el video no lo puedo cargar.

    ResponderEliminar
  2. Gran escritor y mezcla la filosofía con la cruda realidad. Pasa, que del dicho al hecho hay gran trecho y no es facil seguir sus consejos, intentarlo lo intentamos pero conseguirlo es otra cuestión.

    ResponderEliminar
  3. Abramos amigos y amigas nuestros corazones al mar de donde procedemos

    ResponderEliminar
  4. Lección magistral la que nos ofrece Paulo Coelho sobre el vivir el presente.
    El ser humano tiende a aferrarse demasiado al pasado. No es nada fácil el poder evitarlo.
    Soy partidario de ir solucionando los problemas que van surgiendo, aunque eso de borrarlo de la mente en su totalidad es complicado.
    Gracias Fabiola por tu colaboración.

    ResponderEliminar
  5. Sólo cerrando las puertas detrás de uno se abren las ventanas al porvenir.

    ResponderEliminar
  6. A veces cuesta pasar la página, muchas cosas vividas, muy gratos recuerdos pero Dios siempre nos ayuda a salir adelante!

    ResponderEliminar
  7. A veces pasar la página resulta ser la mejor opción... cuando de amor se trata.
    Pero no es tan sencillo poder pasar la página donde están escritas tantas líneas de mi vida.

    ResponderEliminar
  8. Cerrando etapas y abriendo nuevas puertas que traen consigo nuevos desafíos. Dicen por ahí que todo cambio es para mejor.

    ResponderEliminar
  9. Los infieles no tienen valor para aceptar que ya no quieren estar con su pareja. Sean sinceros y terminen la relación antes de hacer daño.

    CIERREN ESA PUERTA Y NO HAGAN SUFRIR A ALGUIEN QUE NO SE LO MERECE.

    ResponderEliminar
  10. Es muy fácil hablar de cerrar puertas, pero a la hora de la verdad no somos capaces de hacerlo

    ResponderEliminar
  11. Sé que las puertas que se me están cerrando son importantes, pero también sé que las que se abrirán para mí serán aún más importantes.

    ResponderEliminar
  12. El problema que yo tengo es que me quedo atascada en pensamientos, situaciones y etapas. Me cuesta eso de "pasar la página". No me gustan los cambios en mi vida.

    ResponderEliminar
  13. Mi cama es muy grande, mi almohada no abraza, la noche es muy larga y no quiero dormir si no es contigo.
    No quiero cerrar ninguna puerta.

    ResponderEliminar
  14. Se que es dificilcerrar ciclos, y más si se trata de amor y de heridas profundas.Soy especialista en vivir en el pasado: "que si era más joven, más atractiva, mas fuerte, que si aquello o lo otro debí hacerlo de manera diferente" que "ahora ya no es igual, que no acepto envejecer, que me conformo con malvivir el presente porque no quiero hacer daño a mi pareja, o ya no puedo hacer lo mismo que antes, etc...". Todo el pasado me ha estado haciendo daño pero ya estoy dispuesta a vivir plenamente el presente, con mis limitaciones, con mi edad y mis arrugas. Me miro al espejo y me veo, he de aceptarme "me digo", como he de aceptar que no vivo el presente en toda su plenitud y eso me mantiene anclada posponiendo las cosas que debo hacer en el presente.
    A todos a quienes he consultado, psicologos incluidos me dicen las mismas palabras "el pasado ya paso, no te recrees en lo que pudo haber sido y no fué, vive el presente, ama el presente, y sobre todo amate a ti mismo tal y como eres"...¿a que es dificil?. Si, pero yo me he propuesto intentarlo e ir cerrando esas puertas, para que se me abran otras. A la hora de la verdad solo debemos dejar de pensar en el pasado y centrarnos en el ahora, simplemnte cuidandonos, o regando las macetas o siendo más sinceros en nuestras relaciones. Solo hay que intentarlo, sin pensar en que no somos capaces de hacerlo.
    Yo, como os digo, me voy a aplicar el cuento y a ver que sale de esta experiencia emocional, queridos "espiritus de Haddock", somos los más valientes.

    ResponderEliminar
  15. Extrañar es la manera más dolorosa de recordar a alguien.

    ResponderEliminar
  16. Lo bueno de comenzar un nuevo día, es que tienes la oportunidad de mejorar los errores del ayer. Pero, lástima que muchos no lo ven así.

    ResponderEliminar
  17. De eso se trata la vida, caer y levantarse para de nuevo empezar.

    ResponderEliminar
  18. ¿Qué haces cuando sabes que tienes que cerrar un círculo o episodio y no quieres hacerlo?

    ResponderEliminar
  19. NUNCA DOY EXPLICACIONES, MIS AMIGOS NO LAS NECESITAN, MIS ENEMIGOS NO LAS CREERAN.

    ResponderEliminar
  20. Fabiola eres genial y tu sinceridad y claridad resplandece en este universo de niebla y penumbra. Tu comentario es un artículo. Felicidades y continua con nosotros, ya eres imprescindible. Besitos.

    ResponderEliminar
  21. Fabi no te conozco pero seguro que eres una mujer fantástica.

    ResponderEliminar
  22. Gracias a Celestino y a Casto por sus palabras. Me han hecho sentirme más fuerte. Quizás por eso somos seres sociales, necesitamos, a veces, que los demás vean en nosotros nuestra luz, lo bueno que llevamos dentro, porque a veces no somos ni conscientes o nos subestimamos. Gracias por hacerme sentir parte de la luz.
    Y le diría al anónimo que tiene que cerrar un ciclo pero según sus palabras no quiere hacerlo, que entonces ha de asumir las consecuencias de esa decisión, que quizás sea menos dolorosa pero se sentirá frustrado siempre a menos que cambie de actitud. Y viva ese ciclo que no cierra con intensidad renovada, si ha elegido seguir viviendolo, debe mejorarlo, dar lo mejor de si, en una palabra hacer todo lo mejor que pueda y sepa hacer para sentirse, primero satisfecho de si mismo, y después alegre porque tomó una decisión. La aceptación de una situación o decisión tomada, es el primer paso para cambiarla, y en ese cambio habrá momentos alegres y otros dificiles, pero si de verdad se compromete con su decisión, siempre verá el camino, o al menos el siguiente paso. ¡Animo amigo!. Es dificil cambiar de actitud, pero si lo hacemos, nuestro entorno cambia.
    Disculpadme si me pongo muy filósofa, pero no puedo evitar ser como soy, y alguien tenía que contestar a esa pregunta porque probablemente quien la hizo, en incluso alguno de nosotros, estamos atrapados en ese dilema y necesitamos respuestas. Besos.

    ResponderEliminar
  23. Tu ers una persona que te entregas a los demás, especie rara en lo tiempos que corre. Yo soy el que te da las gracias por tus comentarios y artículos ya que creo que aportas al blog, y a las personas que lo estamos pasando mal, una ayuda inestimable. Gracias y un fuerte beso.

    ResponderEliminar