Hasta hace unos meses desconocía la poesía de José Ángel Buesa.
Descubrí sus poemas gracias a un programa de televisión; saltando de canal en canal un domingo por la noche, anunciaron la actuación de un concursante recitando un poema y por curiosidad me quedé.
¡Y menudo acierto! No puedo negar que Rafael Turia (el concursante en sí) me conmovió con su forma de recitar, pero sin duda lo que más me llegó al alma fue cada uno de los versos escritos por Buesa.
Este cubano al que llamaban “el poeta enamorado”, que con sencillez y sensibilidad ha sabido describir a la perfección sentimientos, pensamientos u ocasiones a las que, a veces, no es nada fácil comunicar con palabras, determinadas sensaciones y a la vez transmitir las emociones que salen del corazón.
Se deja de querer es el primer poema que conocí de Buesa, cada vez que lo leo me sigue cautivando y sintiendo dentro de mí, lo mismo que aquella noche.
Se deja de querer...
y no se sabe por qué se deja de querer;
es como abrir la mano y encontrarla vacía
y no saber de pronto qué cosa se nos fue.
Se deja de querer...
y es como un río cuya corriente fresca ya no calma la sed,
como andar en otoño sobre las hojas secas
y pisar la hoja verde que no debió caer.
Se deja de querer...
Y es como el ciego que aún dice adiós llorando
después que pasó el tren,
o como quien despierta recordando un camino
pero ya sólo sabe que regresó por él.
Se deja de querer...
como quien deja de andar una calle sin razón, sin saber,
y es hallar un diamante brillando en el rocío
y que ya al recogerlo se evapore también.
Se deja de querer...
y es como un viaje detenido en las sombras
sin seguir ni volver,
y es cortar una rosa para adornar la mesa
y que el viento deshoje la rosa en el mantel.
Se deja de querer...
y es como un niño que ve cómo naufragan sus barcos de papel,
o escribir en la arena la fecha de mañana
y que el mar se la lleve con el nombre de ayer.
Se deja de querer...
y es como un libro que aún abierto hoja a hoja quedó a medio leer,
y es como la sortija que se quitó del dedo
y solo así supimos... que se marcó en la piel.
Se deja de querer...
y no se sabe por qué se deja de querer.
La música que acompaña al vídeo es el Adagio del Concierto para piano número 5 (Emperador) de Beethoven.
¡Qué bonito, Gibran, qué bonito!
ResponderEliminarNo esperaba encontrarme este sábado con este gran artículo, bello, tierno, sensible, que me ha emocionado.
ResponderEliminarBravísimo.
Me apuntaré este poema en mi agenda.
ResponderEliminarNo conocía a este poeta cubano. Dice las cosas entendibles y con mucho sentimiento.
ResponderEliminarEl vídeo ya es su culminación.
Cañete es tan demócrata que sólo utiliza a las mujeres para votar, aunque sea por correo que voten.
ResponderEliminarprecioso artículo y la música encantadora.
ResponderEliminarSiento que hoy me has tocado la fibra sensible y no tienes derecho ya que estamos en jornada de reflexión.
ResponderEliminarHoy final de champions con dos equipos españoles. Suerte para los dos y que gane el que se lo merezca.
ResponderEliminarLa empleada del hogar, llorando, coge su maleta y se va a despedir de su patrona...
ResponderEliminar- A dónde vas? -preguntó la señora.
- Me voy a mi pueblo, a morir cerca de los míos.
- Pero, ¿qué te pasa?, ¿por qué dices eso?
- Señora, usted misma dice que su marido es un gran médico y nunca se equivoca en sus diagnósticos...
- Y es verdad, él nunca se ha equivocado en un diagnóstico... Pero,
¿qué tiene que ver eso contigo?.
- Pues es que esta mañana, cuando le estaba poniendo el desayuno, el
señor me apretó el el trasero y me dijo:
- ¡ De esta noche no pasas !
Me ha gustado muchisimo.
ResponderEliminarMaestro Gibran gracias por volver. Nunca te has ido en mi pensamiento.
ResponderEliminarPrefiero una bonita poesía a un chiste.
ResponderEliminarLeer este artículo me ha echo olvidaar que ya no eres mio.
ResponderEliminarQuiero decir dos cosa: No me gusta el futbol y este artículo es muy bello.
ResponderEliminarHoy será un día más donde los borregos votarán a los mismos de siempre. Este país no tiene remedio amiga Remedios.
ResponderEliminarLas churras y las merinas, votaran hoy a sus respectiva agencias de colocación y redes clientelares.
EliminarEs que no pué sé.
Un poco más de responsabilidad. EL VOTO ES UN DERECHO Y ES SECRETO. Cada cual podrá votar a quien quiera y no tienes derecho a llamarle a nadie borrego.
Eliminarel alma se serena cuando lee cosa tan bonitas.
ResponderEliminarNo considero que el amor serene el alma, más bien creo que la serenidad se alcanza cuando una no está enamorada.
ResponderEliminarCon el amor suelen venir todos los problemas.
Hoy hay menos ambiente en la ciudad que ayer. Ayer habái champion hoy hay tonterias.
ResponderEliminarSotano donde estas que nos tiene hoy el dia muy aburrido.
ResponderEliminarYo soy el que te espera...
ResponderEliminarTu coche tiene un sonido especial y puedo reconocerlo entre mil.
Tus pasos tienen un timbre mágico, son música para mí.
Tu voz es el mayor signo de mi tiempo feliz y, a veces, no es necesario mencionar: oigo tu tristeza.
Si veo tu alegría, me hace feliz!
No sé lo que es olor bueno o malo, solo sé que tu aroma es el mejor.
De algunas presencias a veces me gusta. Otras, no tanto.
Pero tu presencia es lo que mueve mis sentidos.
Tu despierto, me despierta.
Tu durmiendo eres mi Dios, reposando en casa, y yo cuido tu sueño.
Tu mirada es un rayo de luz, cuando me doy cuenta de tu despertar...
Sus manos sobre mí, tienen la ligereza de la paz.
Y, cuando Tu sales, todo está vacío otra vez...
Y vuelvo a esperarte siempre y siempre...
Por el sonido de tu coche;
Por tus pasos;
Por tu voz;
Por tu estado siempre inconstante del humor;
Por tu olor;
Por tu reposo bajo mi vigília;
Por tus ojos;
Por tus manos.
Y soy feliz asi.
Yo soy el que te espera:
_¡Soy tu perro!!!
Lo único que tengo sereno es mi bolsillo que está sin un euro.
ResponderEliminarEs una alegría para todos que nuestro buen amigo Bake Gibran Haya regresado de su silencio. Un artículo muy sereno.
ResponderEliminarBake Gibran le da un complemento especial, todos lo agradeceremos.
EliminarTodos nos hemos enamorados de alguna poesia. Esta de hoy es muy bonita y el video tambien.
ResponderEliminar"Abrir la mano y encontrarla vacía". Ese verso no le gusta a mi Maná-Maná, después del tiempo que le ha costado llenarla. Tengo una duda, qué mano tenía llena, como el dónde de la mosca del maestro Gibran, la izquierda o la derecha. Creo que es prismática, depende desde donde se mire, de frente o de espalda (eso de las izquierdas y las derechas nunca las he comprendido...).
ResponderEliminar¡Truhán y malandrín, ve tomando nota, que el cortijo comienza a ser invadido!
No te apresures tanto en destruir toda la documentación, que el buitre que te va a corroer el alma acaba de salir del cascarón.
¿Cómo se puede anular a todo un departamento económico por la simple razón de que no aparezcan irregularidades morenas?
Te vas a quedar como un niño viendo cómo naufragan sus barcos de papel; tu poder es aburrido, soso y triste, triste y gris.
Piensas que todo lo que tienes será eterno, pero tiempo al tiempo, que el potaje empieza a hervir y la olla sólo pide presión, enamorada de una vávula de escape.
Cada vez serán más los casos de corrupción que salgan a la palestra y tú estás muy cerca. Vas a pensar más en los barrotes que en el sillón quiquiricón.
MANÁ-MANÁ, HACE TIEMPO, MUCHO TIEMPO QUE DEJASTE DE QUERER.
Genial.
EliminarCon serenidad y cordura, a este tipo del Sotano tenemos que hacerle un homenaje. Más que comentarios escribe excelentes artículos. Bravo.
Eliminar¡Qué cosa más bonita, Gibran! Precioso regreso a tu blog.
ResponderEliminarNo se deja de querer a alguien de la noche a la mañana. ¡Qué duro es pasar por el desamor!
ResponderEliminarSe deja de querer despacito, de desilusión en desilusión, de tristeza en tristeza...
ResponderEliminarNunca se deja de querer a una persona, sólo se aprende a vivir sin ella.
ResponderEliminar¡Gibran, qué grande eres!
ResponderEliminarHay que saber diferenciar entre las personas que se van porque quieren irse y las que se van porque no saben cómo quedarse.
ResponderEliminarSí el coito dura 15 minutos, en promedio las parejas disfrutaran de 610 horas de relaciones sexuales durante su vida de casados
ResponderEliminarLa poesía es preciosa, nunca la había leído.
ResponderEliminarTe echábamos de menos, Gibran.
Gracias por descubrirme a este gran poeta. Me ha encantado, Gibran.
ResponderEliminarEl adagio de Beethoven es primoroso.
ResponderEliminarEl adagio es un pequeña pieza musical, de ritmo lento, cerrada y armónica que tiene como requisito el ser retenida en la mente con suma facilidad.
Me gustan los adagios de Tomaso Albinoni.
Robin no aparece, no está ni en la cueva ni con Maruja.
ResponderEliminarEstará con el manamá.
EliminarUn artículo para la reflexión.
ResponderEliminarTodo su conjunto ha quedado muy bien.
Se te echaba de menos ¡Bienvenido!
ResponderEliminarDe las elecciones europeas de ayer destaco, en España, el surgimiento y avance de los partidos "minoritarios" y el batacazo del bipartidismo. Esto puede ser positivo para la vida democrática, y dar confianza al ciudadano pensando que existen más alternativas y no estar sometido siempre al yugo dictatorial de las mayorías absolutas.
ResponderEliminarEsto es el inicio.
Yo dría más: el incio del final para muchos.
EliminarNo te engañes Adrián, todo seguirá igual.
EliminarDejemos la política para los tontos. Me centro en el artículo y me ha gustado; la marcha del blog la veo fabulosa.
ResponderEliminarLa política no se puede dejar de lado porque si tú no vas a la política, la política va hacia ti.
EliminarMaravilloso el artículo. Besitos para tod@s.
ResponderEliminarEl amor está en silencio. Estoy triste. Mi animo no se serena. Me invade la tristeza.
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