14 de enero de 2013

Locura Transitoria

Mi abogado me ha aconsejado que alegue "Locura Transitoria". Si tengo una buena actuación durante el juicio es posible que ni siquiera llegue a pisar la cárcel, estilo americano: lágrimas, cara de desesperación, aparecer enajenado, suplicar el perdón. Si lo hago bien, es posible que me internen en un centro de mejora del coco, él dice que ha funcionado en casos parecidos al mío y que… bien pensado, me dice, es como unas vacaciones largas en un balneario. Puede ser cierto, calma, serenidad, al fin y al cabo es lo que he perseguido siempre… el silencio. 

Después de ese tiempo largo, volver a la vida normal, como antes, es posible que pueda olvidarlo por completo, el tiempo desfigura los hechos, quizás también para los demás fuera un recuerdo difuminado y lejano. Yo podría seguir con mi vida como si hubiera sido un mal sueño, un espejismo, una película de terror. 

La idea es excelente pero no es factible en ningún modo. Ahora mis facciones denotan bienestar, paz interior, mis miembros están relajados, hasta mi caminar y mi habla se han vuelto pausados y dulces. Todo me parece hermoso de nuevo, he vuelto a mirar a los niños con ternura. 

El juez no me escucharía ni cinco minutos, imposible fingir ese estado de perturbación, de pena… la versión de mi abogado no aguantaría, ¿mostrarme arrepentido, deshecho? No tengo la más mínima oportunidad, cuando el juez me pregunte, que lo hará, acerca de mis sentimientos hacia los hechos, sé que mi cara no podrá contenerse y romperé a reír hasta que me duelan los costados, y cuando mi cuerpo deje de doblarse por los espasmos de la risa y sea capaz de pronunciar algunas palabras, creo que lo único que alcanzaría a decir entre las carcajadas sería algo así: 

-Con la venia, Señoría, ¿Qué siento acerca de lo que pasó? ¿Cuál es mi percepción de lo sucedido? Pues… francamente… perdone que no pueda parar de reír… nunca me había sentido tan bien, mi vida cobró sentido el día que asesiné a esa familia del piso de al lado que hacía tanto ruido. 

Hesperia

Esta nueva colaboración de Hesperia, repleta de humor negro, nos hace sonreír  GRACIAS.  

32 comentarios:

  1. Sin comentario. Esta historia es de una peli?

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  2. Llega el juez que preside la audiencia. En ese momento, el fiscal se levanta y le grita al abogado defensor:
    -¡Es usted un sinvergüenza!-
    El abogado defensor le responde gritando:
    -¡Y usted es un ladrón!-
    El Juez toma asiento y tranquilamente dice:
    -Bueno, ya que ambas partes se han identificado plenamente, podemos dar inicio a la audiencia.

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  3. En la mitología griega las Hespérides (en griego antiguo Ἑσπερίδες) eran las ninfas que cuidaban un maravilloso jardín en un lejano rincón del occidente, situado cerca de la cordillera del Atlas en el Norte de África al borde del Océano que circundaba el mundo.1

    Según el poeta griego siciliano Estesícoro, en su poema la Canción de Gerión, y el geógrafo griego Estrabón, en su libro Geografía (volumen III), las Hespérides estaban en Tartessos, un lugar situado en el sur de la península Ibérica.

    Para la época romana, el Jardín de las Hespérides había perdido su lugar arcaico en la religión, reduciéndose a una convención poética, forma en la que fue resucitado en la poesía renacentista, para aludir tanto a un jardín como a las ninfas que moraban allí.

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  4. Un artículo muy original y más que humorístico yo lo ardonaría con la palabra surrealista.

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  5. Hablando en plata, que la familia de al lado te tenía hasta el "pepe!.

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  6. Lo mio no es locura transitoria, es una locura total.
    Me vuelvo loco cuando pienso en la liga perfecta con las personas perfectas en el lugar perfecto, frío pero acogedor.
    La locura de la añoranza persevera en mi carcomido cerebro.
    Río con mis bellos y selectivos pensamientos de momentos vividos, inolvidables. Buen elixir para afrontar con más desparpajo cada instante del presente, pensando que algún día volverá la realidad del pasado, con cada persona, cada piedra, cada lugar, cada sonrisa, cada mirada...
    Se podría interpretar como locura del futuro.
    Besos a las divas que, majestuosamente, dan porte y colorido a un lugar paradisíaco.

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  7. Coincido con Luisa, este artículo es surrealista, no veo el humor.

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  8. Muy fuerte, mucha sangre fría.
    Por lo menos, no miente.

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  9. Tuve un compañero de trabajo, de unos 60 años.
    Un día me dijo: "me voy a jubilar".
    Le rebatí que era imposible.
    Bueno, se hizo el loco. Cogió una baja prolongada hasta que le llamó el tribunal médico.
    Se presenta ante el tribunal con media barba, pelo a lo Einstein y los ojos despistados, después de tres días sin dormir.
    Lo consiguió.
    Se fue a una casa que tenía en el campo a vivir sólo.

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  10. Acabo de dejar el alcohol, brindemos por eso.

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    1. Yo lo haría con un buen cubata y con mucho alcohol.

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  11. Terminada la burbuja inmobiliaria damos la bienvenida a la burbuja sanitaria, made in Madrid. En la cúpula, los mismos.

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    1. Empieza por Madrid y atrapará al resto del país.
      Son los mismos, si no que se lo pregunten a Rodrigo Rato, ahora en Telefónica, antes Urdangarín (menos mal que los dos no caben).

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  12. Menos mal que todo esto es producto de la imaginación, macabra pero imaginación en definitiva. Nadie es capaz, en mente normal, de llegar tan lejos.

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  13. Acudir a la locura transitoria es una salida fácil ya que en la parcela neurológica queda mucho por descubrir.
    Ningún especialista se mojará; no existe la certeza absoluta.
    Este artículo es muy esperpéntico.

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  14. Me has dado una pista, necesito quitarme del medio a más de uno.
    Yo me engancho al carro de la locura transitoria.

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  15. Pues sí que se quedó tranquilo el tío¡¡¡¡¡

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  16. Los abogados son de los carroñeros más grandes que he conocido. Por tal de ganar un caso, que conlleva pasta, son capaces hasta de vender a sus madres.
    No los quiero ni en pintura.

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  17. Gracias Lunes por existir, si no estuvieras no sabría que hacer con tanto odio.

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  18. La cara de mala leche que tiene el pavo de la foto. Sólo con verle ya está condenado.

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  19. Las personas frías suelen tener los sentimientos más reales.

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  20. Los ruidos molestos son faltas a la convivencia. Denuncia cuando ocurra si agotas el diálogo con quienes los generan.

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  21. Los problemas por ruidos entre vecinos acumulan más quejas que las denuncias por ruido a bares ¿Cuándo regulará el ayuntamiento el asunto?

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  22. Odio a mis vecinos. ¡Buenos días, gente que también odia a sus vecinos ruidosos!

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  23. Propongo que enviemos a todos los vecinos molestos a un gueto en las afueras para que se molesten entre ellos

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  24. Con el lote que me he dado este fin de semana de Mentes Criminales ya puedo eliminar a mis vecinos ruidosos sin que se entere nadie...

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  25. Mi vida cobrará sentido el día que, primero mi Maná-Maná y luego el resto de políticos y banqueros, vayan a la cárcel. Que prueben el sonido de los barrotes.

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  26. Lo bueno de los vecinos ruidosos es que si te quedas dormido, ellos te despiertan a martillazos.

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  27. Ahora me explico por qué los sindicalistas hacen tan poco ruido. Lo veo claro, no quieren que les pase lo de la familia vecina de Hesperia.

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  28. La forma de escribir es feminista y además es confusa. Dicho esto tengo que reconocer que es un gran artículo.

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  29. Ya que estamos transitoriamente locos, ¿te apetece otro polvete?

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