Hace unos días estuve de
visita en un centro comercial, como esos que el gran José Saramago ya describió
hace unos años con tanto acierto en su novela La
Caverna. Mientras esperaba a mi mujer,
esa diosa del hogar que todo lo organiza, todo lo gestiona y todo lo controla
sin que se le escape el más mínimo detalle y que defiende y vela por su rebaño
como ningún otro ser de la naturaleza; me asaltó un “sicario del
sistema”, denominado así gracias al amigo de mi hijo y mi escritor favorito, Don Juan Eslava Galán. Me llamó mucho la atención la
agresividad inicial que mostró conmigo.
Como todos los maridos calzonazos, pringaos, esclavos de la braga, etc. que vamos a estos sitios para complacer a nuestras esposas,
permanecía fuera de las tiendas, solo, despistado y aburrido, intentando recrearme la vista observando a la
muchedumbre que pululaba por esos lugares y sin percatarme del gran peligro que
me acechaba.
Este sicario aprovechó el
momento en que estaba solo e indefenso y sin la protección de la jefa,
para atacarme de una manera directa y mortal. La embestida fue feroz, cruel. No
mostraba ningún signo de piedad. En ese momento me sentí muy solo, pude
comprender a esos animales que sirven de comida para los depredadores y que,
aunque estén protegidos por su manada, en los momentos de peligro son
abandonados a su suerte con tal de salvarse ellos. Creo que me eligió a mí como
víctima propiciatoria por mi edad avanzada y mi aspecto de persona acomodada y
con ahorros en el banco. No era tan listo, se equivocó en esto último…
El sicario era un chico
joven, bien parecido y elegantemente vestido con un traje que parecía caro.
Seguramente fue elegido por su banco en un proceso de selección por su
agresividad y su gran capacidad de persuasión, además de las cualidades anteriormente citadas.
Comenzó el ataque utilizando
su mejor arma, la oratoria y usando sus argumentos para hacerme ganar dinero de
una manera rápida y sencilla. Me acosaba a preguntas y me hacía ver que era un
ingenuo si no aceptaba sus condiciones. Era muy agresivo, me acorralaba, me
intimidaba y me ofrecía unos intereses altísimos solo por abrirme una cuenta
con su banco. Todo eran facilidades, todo eran ventajas. Era un negocio redondo
para mí. Me decía que era un incauto si no aceptaba, que la oferta solo duraba unos días y etc.,
etc., etc. Cuando más acorralado estaba, me presentó un contrato para que lo
firmase. Era el momento definitivo, el del ataque al cuello para dejarme sin
respiración, acabar conmigo y servirle de alimento. En esos instantes decidí
que seguir a la defensiva no me ayudaría en nada y decidí contraatacar.
Le dije que, ya que yo era
un ignorante y que como por culpa de la crisis había millones de personas que
lo estaban pasando mal, si él me podía explicar por favor que tenían que ver los bancos en toda esta situación. No
hubo respuesta.
Le pedí por favor que me contara cómo los directores y empleados de cajas y
bancos, como él, aprovechándose de la relación de confianza/amistad que tenían
con sus clientes, habían sido capaces de convencer a esos cientos de miles de
personas para que invirtieran su dinero en las famosas preferentes y demás
negocios redondos para ganar dinero fácil y que luego han resultado ser una
ruina para ellos, no así para los bancos. “Seguramente el negocio que tú me
propones es distinto, es mejor, más seguro, ¿no?”. No hubo respuesta.
Ya no utilicé el por favor. Le pregunté si era humano
que los bancos echaran a la calle, sin importarle donde dormirían esa noche, a
familias enteras con niños, a personas mayores y enfermas, solo por haber
perdido su trabajo o haber avalado a sus hijos y no poder pagar la hipoteca. Si
no se podría buscar alguna solución para detener esos desahucios inhumanos que
están sufriendo millones de personas. Le pregunté que si ya que con nuestro
dinero se rescata a los mafiosos de sus jefes, ¿por qué no se rescataba también
a esas personas? No hubo respuesta y además se empezó a incomodar.
Cuando comprobó que ya no
era una presa tan fácil como había pensado en el primer momento comenzó a
retirarse y ya no quería prestarme más atención. Entonces empezó a acechar a
otras posibles víctimas. Pero ahora el que había probado la sangre era yo y no quería que se me escapara vivo. Le dije que si algún día fuéramos
todas las personas a retirar nuestro dinero a los bancos y no pudieran
devolvérnoslo, a los grandes directores de bancos, Botines y demás empleados
sin escrúpulos y en definitiva a todos los sicarios del sistema sin
sensibilidad ni dignidad como personas, habría que colgarlos de las plazas
públicas, como se hacia en la antigüedad. Aunque me escuchaba, ya no me
prestaba ninguna atención, ya no le interesaba.…
Me fui pensando que si solo
una cuarta parte de la población fuéramos capaces de ponernos de acuerdo en
cualquier tema, la vida sería mejor para casi todos. No así para los pocos que
tienen acumulado el poder y la riqueza y lo aprovechan para explotar a la gran
mayoría.
“No cambiaremos de vida si
no cambiamos la vida”
José Saramago
Fdo.: Juan Vergino (El Templario)
Primera Colaboración de Juan Vergino (El Templario), excelente artículo que nos llama a la reflexión y nos incita a la unión en la lucha por lo que es justo. Templario, guardián de los valores, esperamos mas colaboraciones. GRACIAS.
Artículo reeditado: originalmente publicado el 04 de Diciembre de 2012.
Artículo reeditado: originalmente publicado el 04 de Diciembre de 2012.
Juan en su historia nos demuestra un poquitin como funciona esta marea negra de los mentirosos y culpable en parte de la crísis es la nos ha...
ResponderEliminar¿Permite la ley la castración química?
ResponderEliminarSolo con fines sanoitarios
La propuesta de Nicolas Sarkozy para “castrar”a los delincuentes sexuales se produjo a raíz del caso de Francis Evrard un ex convicto que violó a un niño de seis años.
Si es con fines sanitarios, sí. Porque mucho antes de que surgiera la polémica sobre su aplicación en violadores la castración química nació como terapia contra el cáncer de próstata. La testosterona alimenta los tumores y los hace crecer; pero si desaparece la hormona masculina de la sangre, disminuyen de tamaño.
Por eso, hasta la década de 1950, la extirpación quirúrgica de los genitales masculinos era el remedio extremo para los pacientes de esta enfermedad. Pero, en 1952 se empezó a experimentar con una terapia hormonal basada en fármacos que actuaban sobre la hipófisis, inhibiendo en un 90% la producción de testosterona e impidiendo que el 5% restante se sintetizase con las células cancerígenas. El efecto colateral es que, al eliminar la hormona masculina, desaparece el deseo sexual, igual que en la castración física.
Este artículo del Templario es magnífico y muy bien clarito que lo deja. Te animo a que sigas ilustrándonos. Un beso.
ResponderEliminarUn pobre párroco de pueblo que está muy anciano y se está muriendo en la cama. Entonces siente que le queda poco de vida y llama a gritos al monaguillo:
ResponderEliminar-CURA: Miguelito! Miguelito! Ven corre, por favor...
-MIGUELITO: ¿Qué le pasa padre Antonio?
-CURA: ¡Traédme dos banqueros!!.. Traédme dos banqueros!!!
-MONAGUILLO MIGUELITO: ¿Y para qué quiere usted dos banqueros, padre?
-CURA: Porque quiero morir como Jesucristo,entre dos ladrones...
Muy bueno. Como siempre, relacionado con el tema.
EliminarLo cuentas como una cacería y en realidad así ha sido en los últimos años.
ResponderEliminarCuando la fiesta nacional
ResponderEliminarYo me quedo en la cama igual,
Que la música militar
Nunca me supo levantar.
En el mundo pues no hay mayor pecado
Que el de no seguir al abanderado
Estupefacto. Así me he quedado al leer este artículo.
ResponderEliminarArtículo grandioso por su originalidad y realidad, con unos toques de humor que le da empaque a la totalidad.
Describes perfectamente una situación que la tenemos ante nuestros ojos.
"Sicarios del Sistema", un título crítico, como su contenido, que le viene como anillo al dedo.
Sabia reacción tuviste en ese momento, momento en el cual una gran mayoría hubiese sido atrapada por la gran red glotona y canallesca.
Para nuestro blog es un gran placer poder enseñar a todos nuestros participantes y a todo el planeta tus originales relatos.
Te invitamos a que continúes deleitándonos.
Bienvenido y un fuerte abrazo.
No estoy de acuerdo.
EliminarTemplario, genial tu artículo. Me ha encantado.
ResponderEliminarEl gobierno y Rajoy dan 37000 millones € a los bancos, pero a los ciudadanos engañados con las preferentes no les van a dar ni un céntimo.
ResponderEliminarSe ha escrito mucho sobre esta temática, pero como lo ha hecho el Templario, nadie.
ResponderEliminarMe ha gustado muchísimo su exposición. De diez, chaval.
Díaz Ferrán no confiaba en los banqueros, por eso guardaba 150.000 euros y un kilo de oro en su casa, ¿no?
ResponderEliminarLa parte final, la del contraataque, ha sido genial.
ResponderEliminarEsta chamarasca encorbatada no valen dos gordas.
Para ser consecuentes y coherentes con este sistema neoliberal, deberíamos poder votar a los banqueros, que son los que en realidad nos gobiernan.
ResponderEliminarLo que tenemos que hacer es encerrar a los corruptos, y no prestar ni un solo centimo a los bancos, que sólo sirve para alimentar a los banqueros y empobrecernos a nosotros.
ResponderEliminarNos hace falta un Martin Luther King para que nos dirija.Todo lo demás caerá en saco roto.
ResponderEliminarRajoy dijo que iba a ser un gobierno para todos y por todos... 4.9 millones de parados y subiendo. Banqueros y políticos viviendo mejor que nunca.
ResponderEliminarDISFRUTEN DE LO VOTADO
Sigamos a Islandia que desde que metió en la Cárcel a Políticos corruptos y Banqueros está creciendo al 3,5% y el paro al 5%. ERE Político
ResponderEliminarEnigmático templario, tu relato es fantástico. Bienvenido al blog
ResponderEliminar¿Os habéis fijado que nunca hay una huelga de banqueros?
ResponderEliminarBancos malos con directivos forrados van a despedir a miles de trabajadores y consolidar la estafa de las preferentes; todo a costa del contribuyente.
ResponderEliminar¿Para cuándo un ERE de diputados, senadores, concejales, alcaldes, consejeros, banqueros, militares, aristócratas y tertulianos?
ResponderEliminarNunca.
EliminarTodos a la trena.
Muy bueno. Gran descripción coloquial de la situación actual.
ResponderEliminarSr. Rajoy sepa usted que quienes han arruinado este país no son los ciudadanos que compran televisores, son los políticos y los banqueros.
ResponderEliminarYa es hora de mirar hacia adelante con nuevos modelos fundamentados en transparencia. Los políticos y banqueros no nos van a sacar del pozo.
ResponderEliminarMe cuentan que la comisión que investiga lo del Madrid Arena ha llegado a la conclusión de que hubo una fiesta allí en Halloween...
ResponderEliminarNos desangran económicamente mientras el dinero anda en bolsas de basura y debajo de los colchones de empresarios, políticos y banqueros.
ResponderEliminarAcompañado de algún kilo de oro en metal.
Eliminar¡Golfos!.
Banqueros en España son premiados por genocidio cometido contra familias desahuciadas.
ResponderEliminarUN BUEM FICHAJE, DE TAL ASTILLA UN PALO DE MÁXIMA CALIDAD.
ResponderEliminarYo a lo que describe le llamo hablar claro y dar un bofeton a lo fraconis, es decir con guante duro y preciso.
ResponderEliminarSi existieran muchos ciudadanos como tu seguro que no existirían tantos memos confiados en los botines de los calzados bancario.
ResponderEliminarPaseo por los billetes de cinco euros y quiero terminar con los de alto rango. Espero Ernestina que me ayudes un `poco.
ResponderEliminarRealidad pura y transparente. El mundo de la banca nos está arruinando a todos.
ResponderEliminarMe ha gustado.
ResponderEliminarSuena a estar basado en hechos reales.
ResponderEliminarHas empezado con buen pie; continúa así.
El símil de banqueros con cerdos corruptos no va mal encaminado.
ResponderEliminarEres un crack, Templario.
En este país, los políticos y los banqueros nos quieren meter en un redil, si ya no lo estamos.
ResponderEliminarComparto contigo el que en cualquier tema, contando con un buen porcentaje de la población, podemos derribar cualquier muralla, nos cargaríamos el sistema.
Has utilizado la técnica del director de cine Sam Peckinpah, es decir antes que me den, doy.
ResponderEliminarBuen artículo.
Templario, tu artículo tiene originalidad, valentía y cambatividad. Te felicito por él y te doy las gracias por tu Colaboración.
ResponderEliminarImpresentable tu barba.
ResponderEliminaresto no es lo que era y ademas los articulos no lo renovais
ResponderEliminarEstoy de acuerdo.
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